
La obra artística que acompaña este texto fue elaborada por Ibai,
El hijo de Álvaro Antón.
A Sartre
A veces me sorprendo
robándole varios minutos
a mi infancia,
luego procedo a autocensurarme,
meto los dedos en mi boca,
y dejo que sea la náusea
quien juzgue lo irrelevante del delito.
Daniel Montoly © 2002
Este ajuste de la nauusea, está riquísimo Daniel, riquísimo.... ja ja ja ja eres un monstruo.
ReplyDeleteLa búsqueda y el experimento algunas veces nos arriman a algún río, esto pasó al releer el poema y encontrar la obra de Ibai para ilustrarlo. Gracias Álvaro por el apoyo constante y la solidaridad. De mi locura saldrá algo aunque sea convulso como escribiera Bretón.
ReplyDeleteAbrazos, vale… Daniel
¡Que tremendo vocablo: nausea!
ReplyDeleteAsí, Daniel, tratando las palabras, trazando las
palabras.
Nausea poesía.
Nausea esencia tanta esencia
tantas veces
Nausea.
C.Dolores Escudero
Ay, querida Dolores, tienes mucha razón; esa palabra encierra un universo. Intentando, intentando decir algo y ver cómo poner el mundo de cabeza.
ReplyDeleteTe solicito autorización para colocar el enlace del grupo y de la editorial en los links así podremos crear vínculos. Tú me ayudaste con este poema, recuerdo que lo publique en Adamar y me sugeriste algunos cambios. ¿No recuerdas?
Ahora está vivito y coleando como decimos en El Caribe. Recibe mis saludos, Dolores, ojalá que la visita se repita. Daniel