Saturday, December 11, 2010


VOCES DEL SIGLO XXI


CLAUDIA MASIN
(Resistencia, Argentina, 1972).



EL NIDO

La sonrisa radiactiva del padre
esparciendo su haz de luz mortífera
parece decir: estoy aquí
para trazar la línea,
arbitrario y generoso como Zeus.
De este lado, los pollitos
sanos y hermosos, mis hijos.
Del otro, los cadáveres, sus plumas
revoloteando en el aire
creado por mi aliento.
Otorgo el alimento y el veneno
por partes iguales.
Ordeno la fila, corto los vértices
que sobresalen, satisfechos
por la magnitud de la desgracia que puedo
hacer brotar de las piedras
como agua.




EL HILO

Esta mañana corrí como si ellos
vinieran detrás y ellos sonrieron
desde adentro. Mala. Soy
mala como la nena que cayó
desde un decimo piso por mirarse
demasiado en los espejos.
No era vanidad, no, era apenas
espanto.
Desciendo de tu cuerpo
qué hacer primero:
si tatuar una figura
que te muestre muriendo allí
en tu propio pecho, o desollar
despacio las piernas sonriendo,
o tal vez quemarte
los pómulos ensayando el gesto
de mamita en vigilia pero
quién te toca como lo hace
la única que te ama quién
sino la misma que te arrastra
y se va-asesina- con un rumor
de guerras, de arena, de alegría.





EL TIEMPO

Un hospital del pueblo
a las dos
de la tarde.

El medico
que me atiende se parece
--sospechosamente—
al médico kafkiano.
Estoy feliz
tengo mi propio
médico rural.

Admiro en mi costado
la herida hermosa, los gusanos
como flores exóticas. Escucho:
ha nacido con ella.

Una ronda de niños
se arroja mi cabeza.
Parece una moneda
de cobre en el espacio
clarísimo, en la tarde
sin sol.

--Hay una prenda para quien
la deje caer—aviso,
agitada por tanto vaivén.

Mientras circula de mano
en mano, mi boca apenas dice:
que lo hermoso se convierta
en horrible,
que lo horrible amanezca
belleza.

Bostezan
enfermeras y abuelas
a los pies de mi cama.
Son las dos de la tarde
desde hace cinco años.
Estoy aquí, ocupada
en contar el número
de pasos existentes
de la puerta hasta mí,
el número de veces
que respiro en la noche,
la eternidad me observa,
incrédula, celosa.

Claudia Masin©


Claudia Masin (Resistencia, Argentina, 1972). Licenciada en Psicología, reside en Buenos Aires desde 1990. Tienes publicados los siguientes libros de poemas: Bizarría (1997, Nusud, Buenos Aires) Geología (Seleccionado para su edición por el Plan de Promoción a la Edición de Literatura Argentina de la Secretaría de Cultura, 2001, Nusud, Buenos Aires)
la vista (Premio Casa de América de Poesía Americana 2002, Visor, Madrid) Obtuvo Mención Honorífica del Fondo Nacional de las Artes de Argentina en 2004 por su libro inédito Abrigo.






NOTA DEL AUTOR DEL BLOG: las obras visuales que ilustran esta breve selección de poemas de la poeta argentina, Claudia Masin son del famoso artista cubano, Wilfredo Lam y fueron tomadas de diversas fuentes del Internet.

Friday, December 10, 2010

Sergio Pitol: “estoy presente en más de 50 años de escritura”


El escritor mexicano presentó Una autobiografía soterrada en la FIL de Guadalajara • “Los autores en mis años de formación fueron una formidable estirpe de excéntricos”

por Juan Carlos G. Partida

Guadalajara, Jal., 29 de noviembre. Una autobiografía soterrada es el libro de Sergio Pitol que da cuenta de sus épocas visibles e invisibles; una delicia que el autor, en voz de su amigo y también escritor Martín Solares, presentó la noche del domingo en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara.

“En todo lo que he escrito, cuentos, novelas, crónicas, hasta en ensayos, me presento por todas partes, durante más de cincuenta años de escritura estoy presente. No hay nada ahí que no esté extraído de los archivos de mi vida: espacios, personajes, un niño huérfano a los cuatro años, largamente postrado por la malaria, un ingenio azucarero cercado por una selva tropical (...)”, cuenta Pitol en voz de Solares, pues no puede hablar, debido a una afección.

Enfermo consuetudinario en su niñez, de repente y milagrosamente surge la salud, lo que da paso al aventurero, al adolescente que solo se siente bien en círculos de excéntricos, “un anarquista cercano del budismo tibetano”.

Y después, el escritor, los festejos, los desastres, los premios. Y ahora, la vejez.

“¿Cómo entonces de nuevo seré invisible? En mis narraciones soy más bien un personaje enmascarado que se mueve en los corredores, un observador de las tramas para despejar las oscuridades de la obra o encapotarlas más. Dejémoslo así”, continúa Pitol en voz de Solares.

Tener una abuela lectora

“En 1956 escribí —comparte Pitol— mis primeros cuentos, tenía veintitrés años y al año siguiente publiqué mi primer libro, Tiempo cercado, lo editó la revista Estaciones. Fue el primero y último de una colección de jóvenes autores que José de la Colina había concebido, no llegó ni siquiera a las librerías y por lo mismo tuvo una casi nula atención crítica. Aquellos cuentos iniciales tenían como fuente los relatos que en mi infancia le había oído a mi abuela, en largos y minuciosos monólogos”.

Esos cuentos a los que se refiere Pitol giraban sobre un viaje a Italia que la abuela tuvo en su niñez, acompañada de su padre y sus hermanas, una estancia de varios años para educarse, pero sobre todo, “las infinitas vicisitudes sufridas a su regreso a México”, cuando vivió la Revolución, la viudez en plena juventud, los ranchos destrozados, las dificultades de toda clase, penas que Pitol vio cómo su abuela trataba de mitigar mediante un incesante consumo de novelas.

Recuerda que entonces, viviendo en Europa, enviaba sus manuscritos a las editoriales en México.

“No tener una relación personal con los editores, lectores y críticos mexicanos, fue para mí provechoso. Lejos de México no tenía noticias de las modas intelectuales, no pertenecía a ningún grupo ni leía lo que mis contemporáneos leían. Era como escribir en el desierto (...)”.

Y revela uno de los misterios invisibles de la visibilidad de su lectura: “Desde mis principios me propuse que el lector no advirtiera del todo los procedimientos estilísticos, que no supiera cómo estaba armado el cuento. Mis autores en esos años de formación fueron sobre todo ingleses, clásicos y contemporáneos, y en especial la formidable estirpe de excéntricos que ha producido esa literatura en todas sus épocas. Me familiaricé también con los asombrosos polacos de los años 30” del siglo anterior.

Tomado de La Jornada

Tomado de La Ventana

Tuesday, December 7, 2010























El Nadaísmo, así pasen cincuenta años
| Armando Romero |
Ensayo



Se puede aseverar, sin lugar a dudas, que el nadaísmo fue el movimiento literario más importante en el siglo XX colombiano. Ahora, cuando se cumplen 50 años de su fundación, es preciso volver a recapacitar en lo que fue este grito de protesta contra la sociedad colombiana desde la literatura y el pensamiento. Protesta contra una sociedad que había instaurado la violencia política y social como forma de acción, la cual favorecía los intereses de las clases políticas dominantes, ya fuesen liberales o conservadores. El nadaísmo es así una respuesta violenta contra la violencia, que en 1948 se había desatado sobre todo el país. Sin embargo, el hecho de que este movimiento haya perdurado por todos estos años, y todavía encuentre miembros activos y simpatizantes, es síntoma de que las causas que lo originaron todavía están vigentes, y que la endémica violencia colombiana, que hoy día ve en los secuestros, los asesinatos, el narcotráfico, las guerrillas y los paramilitares, una realidad casi tan cruel y violenta como la que vivió en la décadas pasadas.


Fundación del Nadaísmo


De Andes, un pueblo en lo alto de la montaña antioqueña, Gonzalo Arango bajaría a los 17 años a Medellín, siguiendo los pasos de una migración de habitantes del campo que, gracias a la violencia desatada, irían a engrosar las ciudades.

Había nacido en 1931. Pero Arango no era un cam­pesino, era hijo de un telegrafista de pueblo que, aunque pobre, se las ingenió para mandar a su hijo a estudiar en la Universidad de Antioquia, donde cur­sará hasta el tercer año de derecho. Es indudable que el fenóme­no de la violencia causó un profundo cambio en la vida de Gon­zalo Arango, especialmente desde el momento en que se desató con más furia debido al asesinato del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, el 9 de abril de 1948:

9 de abril: la misteriosa madeja del destino. La muerte de este hombre altera mi vida (…). La belleza de la revolu­ción se revolcaba en el lodo de la demencia y el crimen: el aborto era bautizado por el diablo. Esa tarde, la Revo­lución se resbaló y cayó en el infierno de la violencia. Des­pués supe por qué. Aquella tarde no lo comprendí. Mi pa­dre nos encerró en un cuarto oscuro y nos rezó como siempre que había tormenta: Aplace Señor Tu ira, Tu jus­ticia y tu rigor…- Y también: Señor Dios de los Ejércitos, llenos están los Cielos y la Tierra de la Majestad de vues­tra Gloria…- Para mí esas oraciones eran el fin del mun­do, el diluvio y la guerra. Yo rezaba y lloraba de espanto al mismo tiempo. [01]

La conformación social andina colombiana, de donde Arango es origi­nario, es cerrada, católica y tradicional hasta el fondo. La vio­lencia, y todo el agrietamiento estructural de la sociedad que ella significó, conllevó una quiebra en las instituciones fundamenta­les, una nueva ordenación de los valores. La institución políti­ca, religiosa, cultural, familiar, judicial, etc., en que se basaba la sociedad colombiana de ese entonces hizo crisis, perdió con­fianza en sí misma, y frente al fracaso de los partidos políticos, institucionalizó la violencia que iba a producir un tipo de con­ducta criminal que se convertiría en norma. El enemigo estaba en todas partes porque los grupos en el poder le habían hecho creer al colombiano que el enemigo era él mismo, que debía auto-destruirse a fin de encontrar su salvación: no hay códigos ni le­yes que puedan contener el genocidio. Y este es el comienzo del Nadaísmo, pregunta y respuesta a una sociedad amordazada, a la cual no se le habían permitido escapes liberadores, erupcio­nes de la subconciencia, y esto no solamente al campo raso de la vida de todos los días sino en el área de la cultura, y en espe­cial de la literatura, donde a pesar del esfuerzo de unos pocos, todavía los rezagos del neo-clasicismo, del parnasianismo y de un tradicionalismo clerical y académico, seguían asustando a los atisbos vanguardistas que lastimosamente no florecieron a su de­bido tiempo.


Es claro que la muerte de Gaitán vino a frustrar el empeño creador de la masa colombiana y a reordenar la historia del país:

Si Gaitán no hubiera muerto, yo no sería hoy Gonzalo Arango. ¿quién o qué sería? No lo sé. No juego a la nos­talgia ni a la profecía. Pero sí tengo la certeza de que sí Gaitán viviera, el Nadaísmo nunca habría existido en Co­lombia. Entonces, ¿dónde estaríamos y qué estaríamos ha­ciendo los escritores nuevos? Es casi seguro que hoy esta­ríamos al lado de Gaitán, con Gaitán a la carga, defendiendo sus banderas revolucionarias. [02]

Una inclinación suya a torcerlo todo, como él mismo diría, lo lleva a Arango a dejar la carrera de derecho luego del tercer año y hacerse profesor de literatura, bibliotecario y colabora­dor del Suplemento Literario del diario conservador El Colom­biano. En 1953 se une al “Man”, grupo político fundado por el General Gustavo Rojas Pinilla como una tercera fuerza en el país que representaba el binomio pueblo-fuerzas armadas. Allí permanecerá hasta 1957 cuando luego de ser nombrado miem­bro suplente de la Asamblea Nacional Constituyente que se en­cargaría de reelegir a Rojas Pinilla, la dictadura cae y él tiene que refugiarse en Cali mientras una muchedumbre pide su ca­beza en las calles de Medellín.

Ya en Cali, donde pasa su asilo político, sus ideas y opiniones se radicalizarán profundamente. Allí redacta, en 1958, su primer Manifiesto Nadaista, que leido una noche en un café de la Avenida Sexta despierta inquietud y adhesión en un grupo de muchachos inconformes, hijos y desterrados de la violencia. Ese mismo año lo editará en Medellín:

El escándalo corre velozmente y junto con sus amigos deci­de quemar todos los libros de su biblioteca en el parque Berrio de Medellín, lee un discurso escrito en papel toilette donde ya predica la nueva oscuridad. Sin embargo, desde un principio se niega a dar una definición precisa del movimiento, lo cual se convertirá en caballo de batalla para desconcierto de críticos, gramáticos y dueños de enciclopedias o diccionarios. “El Na­daísmo es un estado del espíritu revolucionario, y excede toda clase de previsiones y posibilidades”, escribe como introducción al Manifiesto. [04]

Esto posibilitó que la coherencia y cohesión del movimiento estuviera más allá de las consignas y de los dogmas, y se afincara en una actitud frente a la vida y a los medios de expresión, llámense estos literatura o arte, mediante una activi­dad subversiva en el plano del espíritu y en relación directa con la sociedad del momento. Los nombres de Sartre, Breton, Kierkegaard, Kafka, Gide, Mallarmé, entre otros, vienen a dar soporte a sus planteamien­tos, pero no desde el punto de vista formal de la literatura sino desde los ángulos de fricción con la vida. No obstante, y como suele suceder en casi todos los grupos que aspiran a entrometer­se en la vanguardia, es la poesía el arma predilecta:

Trataré de definir la poesía como toda acción del espíritu completamente gratuita y desinteresada de presupuestos éticos, sociales, políticos o racionales que se formulan los hombres como programas de felicidad y justicia.

Este ejercicio del espíritu creador originado en las po­tencias sensibles lo limito al campo de una subjetividad pura, inútil, al acto solitario del Ser.

El ejercicio poético carece de función social o mora­lizadora. Es un acto que se agota en sí mismo, el más inú­til del espíritu creador. Jean Paul Sartre lo definió como la elección del fracaso.

La poesía es, en esencia, una aspiración de belleza solitaria. El más corruptor vicio onanista del espíritu moderno. [05]

Si la violencia había arrasado con los viejos valores de la sociedad colombiana no se trataba pues, aquí, de restituirlos, sino de forjar, a costa de una profunda rebelión, nuevos valores que opuestos a los anteriores frontalmente abrieran perspecti­vas diferentes para encarar la vida. Sin embargo, Arango era consciente de que este proyecto de escándalo y desorden no se­ría fácil de lograr:

La lucha será desigual considerando el poder concentra­do de que disponen nuestros enemigos: la economía del país, las universidades, la religión, la prensa y demás ve­hículos de expresión del pensamiento. Y además, la de­primente ignorancia del pueblo colombiano y su reveren­te credulidad a los mitos que lo sumen en un lastimoso oscurantismo (…). Ante empresa de tan grandes propor­ciones, renunciamos a destruir el orden establecido. So­mos impotentes. La aspiración del Nadaísmo es desacre­ditar ese orden. [06]

Es importante señalar aquí que, como lo dejara bien claro Arango, el Nadaísmo no surge como un movimiento hacia la vic­toria sino como una expresión del fracaso de una generación que hará de ese mismo fracaso su arma de batalla; de allí la dialécti­ca quemante del Manifiesto y su fe en una poesía sembrada en sí misma, inútil como arma redentora. Al concluir, Gonzalo Arango, El Profeta de la Nueva Oscuridad, como se autodeno­minará desde ese entonces, bosqueja el programa de lucha del movimiento:

En esta sociedad en que la mentira está convertida en or­den, no hay nadie sobre quien triunfar, sino sobre uno mis­mo. Y luchar contra los otros significa enseñarles a triun­far sobre ellos mismos.

La misión es ésta:

No dejar una fe intacta, ni un ídolo en su sitio. Todo lo que está consagrado como adorable por el orden impe­rante será examinado y revisado. Se conservará solamen­te aquello que esté orientado hacia la revolución, y que fundamente por su consistencia indestructible, los cimien­tos de la sociedad nueva.

Lo demás será removido y destruido.

¿Hasta dónde llegaremos? El fin no importa desde el punto de vista de la lucha. Porque no llegar es también el cumplimiento de un destino. [07]

En esa contradicción o paradoja se movería el Nadaísmo, desconcertando y desubicando a sus adherentes y contrincantes.

Geniales, Locos y Peligrosos

En Medellín. y en 1959, se organiza por la curia un Con­greso Nacional de Escritores Católicos, cuyo discurso de inau­guración estaba a cargo de Eduardo Carranza. Arango redacta un Manifiesto al Congreso de Escribanos Católicos, el cual es distribuido entre los asistentes y los no asistentes. El Manifiesto aclaraba por qué los Nadaístas no eran católicos:

no somos católicos:

porque dios hace quince días que no se afeita

porque el diablo tiene caja de dientes.

porque san juan de la cruz era hermafrodita.

porque santa teresa era una mística lesbiana.

porque la filosofía de santo tomás de aquino está fundada en dios

y dios no ha existido nunca. porque somos fieles descendientes

de los micos de darwin.

porque en los infiernos no hay fogones “westinghouse” sino pailas

trogloditas de la edad de piedra re­mendadas

por lo gitanos. Y a nosotros nos gusta condenarnos confortablemente al estilo yanki.

no somos católicos por respeto a nosostros mismos. [08]

Y con el mismo tono irrevente y sacrílego continuaba im­pugnando a estos intelectuales que se habían reunido para pe­dirle al Señor Todopoderoso salvara a Colombia de los males en que estaba sumida:

… ustedes fracasaron. ¿Qué nos dejan después de 50 años de “pensamiento católico”? Esto: un pueblo miserable, ignorante, hambriento, servil, explotado, fetichista, crimi­nal, bruto. Ese es el producto de sus enormes sermones sobre moral, de su metafísica bastarda, de su fe de carbo­neros, ustedes son los responsables de esta crisis que nos envilece y nos cubre de ignominia. [09]

Y advertía severamente:

En nombre del NADAISMO les impedimos defecarse una vez más en esta pobre alcantarilla que se llama Colom­bia. Y les manifestamos que los delitos que se cometen contra el espíritu no quedarán impunes.

Irrespetuosamente a los escribanos católicos:

SOMOS GENIALES

LOCOS,

Y PELIGROSOS. [10]



El escándalo se había instituido. La policía detiene a Arango y lo manda al tercer patio de la cárcel de La Ladera, entre los asesinos y criminales más peligrosos. Experiencia que cano­nizará en vida al Profeta y que se reflejará posteriormente en muchos de sus escritos.

Pero había que continuar bombardeando la institución re­ligiosa, con más saña y furor. Un domingo por la mañana, y en plena misa mayor en la Basílica de Medellín, un grupo de nadaístas comulga pero en vez de tragarse las hostias las tiran al suelo o las meten en libros que llevan en la mano mientras prenden gloriosos cigarrillos. La multitud al grito horrorizado de ¡Sacrilegio! los persigue a fin de lincharlos. Darío Lemos es capturado por la policía quien lo salva así de una muerte segu­ra. Sólo será liberado mediante un acto de contricción pública, que se organiza en el Estadio Atanasio Girardot, en presencia, por supuesto, de los integrantes del grupo Nadaísta, previo dis­fraz. Los nadaístas de Cali amenazan con repetir el mismo acto sacrílego en la Catedral de Cali y ésta permanece custodiada du­rante meses por el ejército.

Una hoja volante, titulada “El Alacrán”, anónima, pero rea­lizada por los integrantes del grupo de Cali (Jaime Jaramillo Es­cobar, quien firmaba como X-504, Alfredo Sánchez, Jota Ma­rio, Dukardo Hinestroza, entre otros), circula por calles y oficinas, regando improperios e impugnaciones contra las altas autoridades eclesiásticas. La reacción de la prensa y de las Da­mas de Acción Católica pide al gobierno que reprima, con todo el peso de la ley, semejantes desatinos. Sin embargo, el miedo cunde por todas las parroquias colombianas. El presbítero Rai-mundo Alvarez, de la iglesia de los Dolores de Manizales, escri­bía así al diario El Espectador de Bogotá:

MANIZALES, julio 12.—Estimado Señor: En esta cató­lica ciudad de Manizales se ha venido rumorando con gran insistencia, un hecho que ha causado hondo desconcierto y sorpresa por la osadía y desvergüenza que mora en el espíritu del algunos jóvenes que dicen llamarse nadaístas. Es el caso que existe una carta dirigida al Excmo. y Rvdmo. Obispo de la Diócesis de Cali, Monseñor Francisco Ga­llego Pérez, que en paz descanse, por los nadaístas cale­ños, en términos que riñen con la sana moral y las buenas costumbres en tono altanero e irrespetuoso con la autori­dad eclesiástica de esa ciudad; dicha carta fue dirigida en los días en que el Excmo. Señor Obispo guardaba cama por sus quebrantos de salud; y que a mi parecer motivó el desenlace fatal en su ilustre persona. [11]

Y aunque los nadaístas sabían perfectamente que era muy difícil que ellos fueran los causantes de la muerte de este sacer­dote, nada podía hacerlos más felices que este tipo de sospecha, porque los revestía de un tinte de maldad que les encantaba, además de que impulsaba y ponía en movimien­to lo que sería su primer arma de combate: el escándalo, y su consiguiente propagación por la prensa, lo cual representaba pu­blicidad, y por lo tanto vida, acción.

A cortar cabezas

El Nadaísmo reconocía en Fernando González, el filósofo colombiano de Viaje a pie y El hermafrodita dormido, a un “gurú” o maestro. González, en uno de sus artículos laudato­rios del movimiento había dicho: “Voy a orar por estos jóve­nes, que se están desnudando “y en uno de sus libros: “Mucho ojo a esto, jóvenes, que cuando se habla de Nadaísmo se está hablando de sucediendo o Vida”. También se veía en Vargas Vila, otro resucitado por el Nadaísmo, una libertad anárquica y ro­mántica, en Luis Carlos López al destripador de las almibara­das rosas del Parnaso colombiano, en León de Greiff al búho peripatético y estático que había cambiado su vida por cualquier cosa; pero eran pocos, dentro de los poetas e intelectuales que se salvaban de la crítica devastadora del Nadaísmo. La diatriba violenta se lanzó entonces contra todos los que representaban un mito nacional o defendían una tradi­ción conservadora y clasista. Y así fueron cayendo cabezas a ha­chazo limpio: “Hay más poesía en 50 KPH que en toda la obra completa de Guillermo Valencia”, maquinaba Jota Mario en una de sus conferencias.

En un reportaje al diario El Tiempo de Bogotá, a fines de 1959, el poeta Rafael Maya declaraba, entre otras cosas, que el Nadaísmo le parecía “algo muy oscuro” y dejaba ver su desdén por este Movimiento. Nada mejor para que, desde Medellín, se lanzaran los integrantes del grupo contra quien representaba la mejor retórica cultural colombiana. En sus apartes la carta acu­satoria decía:

¿Conque le parece “muy oscuro” el Nadaísmo? Es que usted tiene miopía en el cerebro y canas en el corazón. ( … ) Abreviamos: El Nadaísmo es todo lo que no es usted. En consecuencia, es una cosa buena. La próxima vez que se lo pregunten diga: “El Nadaísmo es todo lo que no soy yo”. Y le habrá dicho a la juventud una verdad, la prime­ra en este proceso de tergiversaciones sobre la falsedad de que usted es un maestro de la juventud.

Maya: Deseamos su silencio de todo corazón. No publi­que más libros. No contribuya más a la corrupción de los espíritus. Sus libros han contribuido grandemente al des­prestigio de la literatura y de la decencia colombiana. [12]

Poco tiempo después, y también redactado por Gonzalo Arango en colaboración con los nadaístas de Medellín aparecerá el Mensaje Bisiesto a los Intelectuales Colombianos (1960), una especie de tarjeta de nuevo año con puntillazos mordaces. Veamos algunos:

Eduardo Carranza: Usted es un caso perdido: todavía cree en la poesía y en las mujeres… ¡Oh, Teresa! en cuyo culo el cielo empieza.

Arturo Camacho Ramirez: ¿usted cree que Baudelaire fu­maba marihuana en la televisora?

Fernando Botero: ¿usted se cree el salvador de la pintura moderna porque tiene barbitas de nazareno? usted es un católico plástico porque funda los dogmas de la belleza en el misterio.

Andrés Holguín: poeta tortuguez: si sabe tanto de retóri­ca, díganos cuantos piojos tiene un soneto.

Eduardo Mendoza Vareta: usted le da mucha importan­cia a los académicos de paraguas y cajas de dientes. Como se ve, usted no cree en el nadaísmo ni en la guillotina. Pero le aconsejamos no sea tan incrédulo.

Luis López de Mesa: viejo sardina: si dios tuviera noti­cias de su existencia estaría arrepentido de crear al hombre. [13]

Este sería el comienzo de toda una serie de polémicas ca­nalizadas a través de panfletos, manifiestos o artículos de pren­sa, en las cuales se enjuiciaba a los intelectuales colombianos, sin discriminación de orden, escuela o principio: Eduar­do Caballero Calderón, Jaime Mejía Duque, Manuel Mejía Va­llejo, Eduardo Gómez, Oscar Collazos, Jorge Padilla, Marta Tra­ba, Jorge Zalamea, Gabriel García Márquez, y por supuesto muchos escritores de provincia.

Gonzalo Arango, quien conocía bastante bien las artima­ñas de la política colombiana, tal vez por ser él mismo un polí­tico a su manera y por haber participado en ella, condujo al Na­daísmo a una posición de crítica intransigente e irreconciliable con los patrones establecidos por los partidos tradicionales y más aún contra disidencias liberales como la de Alfonso López Mi­chelsen y los partidos de izquierda. En el Mensaje Bisiesto se lee:

Alfonso López Micheisen.- nosotros somos pasajeros de la revolución, pero gracias, no viajamos en tercera. [14]

Pero era fácil arremeter contra los partidos tradicionales, no así contra la izquierda que, lógicamente, por su carácter an­tigubernamental, anticlerical, etc., encontraba simpatías en los militantes del Nadaísmo. Es por esto que desde un comienzo el Nadaísmo mostró su adhesión firme con la revolución cubana y sus principios de cambio. En mensaje enviado a Fidel Castro y firmado por todos los integrantes del grupo, decía:

Nosostros nos identificamos con Cuba, respaldamos su pensamiento político de izquierda y vemos en su Revolu­ción la imagen de nuestro porvenir. [15]

Por lo general ésta será la posición política que el Nadaís­mo defenderá frente a la revolución cubana, con los altibajos que otorgará el suceder político y con las paradojas y contra­dicciones que caracterizan al Movimiento. No obstante, los di­rigentes intelectuales de la revolución cubana siempre fueron muy escépticos con respecto al Nadaísmo, y en esto debe verse la mano de los escritores y artistas de la izquierda colombiana que se oponían frontalmente al Movimiento.

Lo que hemos destacado hasta aquí recoge parcialmente el período de fundación del Movimiento. Las circunstancias posteriores, que lo convertirán en un movimiento literario por encima de otras cosas, marcarían otros rumbos, que si bien eran controvertidos, ya no tendrían a la violencia como respuesta directa a la realidad colombiana, sino a la literatura y al juego de las ideas. Sin embargo, ya para aquel entonces el Nadaísmo había logrado su cometido. Esta actitud redentora, si podemos decirlo así, del pensamiento y la vida nacional, sólo verá sus frutos en las décadas posteriores, cuando los poetas y escritores jóvenes vuelven sus ojos con inmenso afec­to y solidaridad hacia los logros del movimiento, hacia esa res­puesta violenta a la violencia colombiana.

NOTAS

1. Gonzalo Arango, Obra negra (Buenos Aires: Ediciones Carlos Lohlé, 1974), p. 59.

2. Gonzalo Arango, Obra negra, p. 61.

3. Gonzalo Arango, Primer manifiesto (Medellín, Tipografía Amistad, 1958), parte IV.

4. Gonzalo Arango, Primer manifiesto, parte 1.

5. Gonzalo Arango, Primer manifiesto, parte III

6. Gonzalo Arango, Primer manifiesto, parte III.

7. Gonzalo Arango, Primer manifiesto, parte III.

8. Gonzalo Arango, Obra negra, p. 24.

9. Gonzalo Arango, Obra negra, p. 24.

10. Gonzalo Arango, Obra negra, p. 26, 27.

11. El Espectador, Bogotá, 13 de julio, 1959, p. 5.

12. Esquirla, Cali, 8 de noviembre de 1959, I época.

13. Hoja volante. Archivo del autor.

14. Hoja volante, Archivo del autor.

15. Esquirla, Cali, 8 de mayo de 1960, 1 época.

Armando Romero (Colômbia, 1944). Poeta, ensaísta e prosador. Foi um dos integrantes do movimento Nadaísta. Armando é um intenso apaixonado pelas viagens, o que o levou a viver em países como México, Venezuela, Grécia e Estados Unidos. Publicou os seguintes livros de poesia: Los móviles del sueño (1976), El poeta de vidrio (1976), Del aire a la mano (1983), Las combinaciones debidas (1989), A rienda suelta (1991), Hagion Oros-El Monte Santo (2001), Cuatro líneas (2002), y De noche el sol (2004). Em 2005 se publica A vista del tiempo (antología poética 1961-2004). Entre seus livros de ensaios, destacam-se Las palabras están en situación (1985), y El Nadaísmo o la búsqueda de una vanguardia (1988). A presente entrevista foi realizada em dezembro de 2006, e integra a versão espanhola de Escritura Conquistada (em preparação). Contacto: armando_romero@msn.com.


Nota del autor del blog: Este ensayo fue publicado originalmente en la revista literaria brasileña AGULHA HISPÂNICA y reprducido aquí gracias a la cortesía del autor., y de Floriano Martins. Pueden accede a la publicación donde aparece en el siguiente enlace: http://www.jornaldepoesia.jor.br/BHAH03romero.htm

Sunday, December 5, 2010

“Si la vida no fuese mágica, no existiría la escritura”


Literatura Entrevista a la escritora guadalupeña Maryse Condé, tras finalizar la Semana de Autor[a] que la Casa de las Américas le dedicó este mes de noviembre

por Marianela González

Le gusta la gente un poco alegre, un poco triste. No se puede andar por la vida agradando todo el tiempo, a todo el mundo. Y quizá sea eso, justamente, lo que nos agrade de Maryse Condé: la escritora guadalupeña reserva las palabras para la hoja en blanco y los encomios, para quienes los merezcan. Pero si está usted del lado del público, sentirá que pertenece a esa troupe de privilegiados. Una hora le es poca para narrar su vida, y quienes la escuchan resistirían varias más.

Ella, bruja negra de Salem, conoce bien los ardides de la palabra: lo aprendió con los griots en África, a donde viajara en busca de sí misma cuando el espejo —el mismo que la vio crecer francesa y blanca— le devolviera a los diceiséis años una mujer negra totalmente desconocida.

En español, escasean las traducciones a su obra. Pero en francés, la producción es múltiple: Ségou: Les murailles de terre (1984), Ségou: La terre en mientes (1985), Moi, Tituba, sorcière noire de Salem (1986) y La vie scélérate (1987), son los títulos de sus novelas fundamentales. De ellas han bebido durante décadas la crítica y los estudios sobre el Caribe, desde todas las latitudes.

Muchos de los centros académicos que constituyen la médula del pensamiento cultural occidental, han reconocido sus obras con importantes distinciones: Maryse Condé (1934) es también Honoris Causa por el Occidental Collage de Los Ángeles (1986), por el Lehman College de Nueva York (1994) y por la Universidad de West Indies (2005). Entre los más recientes: Orden de Comendador de las Artes y las Letras (2001), el trofeo de las artes afrocaribeñas por su novela Les Belles Ténébreuse (2008) y el mismo galardón, el pasado año, por la obra de su vida. Como parte de su empeño por extender el conocimiento sobre el Caribe francófono a otras latitudes, dirigió el French and Francophone Institute en la Universidad de Columbia, donde aún funge como Profesora Emérita de Francés.

Con ese aval se presenta Maryse Condé ante los lectores cubanos. A su novela Moi, Tituba, sorcière noire de Salem le ha nacido este año una hermana: Yo, Tituba, la bruja negra de Salem, a cargo del Fondo Editorial Casa de las Américas. Invitada a la Semana de Autor que cada año dedica la institución a un escritor latinoamericano, llegó a Cuba una de las voces imprescindibles del pensamiento caribeño poscolonial: la guadalupeña que vivió su primera revolución cuando oyó hablar por primera vez de Aimé Césaire y Franz Fanon… ¡en Francia, después de haber vivido dieciséis años en su isla natal!

Durante cinco días, hemos escuchado de su vida y de su amplia producción intelectual, en voces de investigadores y en la suya propia: aquel encuentro memorable de una hora que apenas me dejó preguntas, ante tanta respuesta.

Narrativa para niños y adultos, dramaturgia, crítica... ¿Qué encuentra Maryse Condé en cada una de estas formas?

—Trabajo sobre todo en la novela, aunque es cierto que a veces hago teatro o escribo algunos libros para niños. El teatro, por ejemplo, me motiva porque siento que me acerca mucho a la gente. Pero si algo he aprendido es que para un autor no existe diferencia entre esas creaciones: todas ellas expresan un mismo yo interno, solo que en forma múltiple y diversa. Luego, la crítica hace la diferencia; pero el escritor simplemente escribe, se sirve de las palabras para hacer una música o un sonido y contar una historia.

»Eso lo aprendí también de África. La poesía, la prosa, la canción, como nos enseñaron a lo francés, no tiene necesariamente esas divisiones en su esencia. Las divisiones son pura forma. Todo proviene de un mismo origen: la palabra. La ponemos a cocinar en un gran horno, hasta lograr una noción más profunda del ser humano».

Dice usted que un libro tiene “sentido y sonido”; espera que cuando abramos una obra suya, encontremos no solo una historia, sino “una voz” que nos hable. También lo pide Glissant en El discurso antillano: ser “escuchado”, más que “leído”. ¿Cuánto marca la oralidad a la literatura caribeña, al pensamiento cultural caribeño?

—¿Te digo de verdad?: menos de lo que podría. Ejemplifico con mi propio caso: fui educada por mis padres, quienes no creían en la palabra creole. Cuando era niña, me leían los cuentos de la Caperucita o la Cenicienta. Me impedían hasta interesarme por la música popular. De modo que, evidentemente, la oralidad caribeña no me ha marcado como escritora. Sin embargo, no dudo que pueda ser importante para otros: la vida de un escritor define su creación, él mismo es la materia de su obra.

¿Por eso la crítica siente en sus novelas un halo autobiográfico?

—Tal vez.

Cuando leyó Cumbres Borrascosas, sintió que “Emily Brontë podía hablar a Maryse Condé más de un siglo después, porque su historia era similar”. Como escritora, ¿su sustrato es el ser humano, más que su tiempo?

—Como suelo decir, la literatura existe para decir la verdad. Y si la verdad de un ser humano dice también alguna verdad sobre su tiempo, pues el provecho es doble. La literatura no existe para inventar mundos mágicos: existe, acaso, para sacar lo mágico de nuestro propio mundo. Ese le pertenece a cada persona, por separado.

Como lectores —incluso a los caribeños—, a veces nos parecería que existe un Caribe real y uno ficcional, “maravilloso”, derivado de la literatura o las artes visuales… ¿qué opina usted?

—Pienso que la magia del Caribe forma parte de la vida del Caribe y, por tanto, de la escritura. Como escritores, siento que no tenemos que esforzarnos para hallar un elemento mágico: está ahí, en todos los aspectos, incluso de la vida misma. Si la vida no fuese mágica o maravillosa, no existiría la escritura.

El pensamiento sobre el Caribe que se produce dentro de la región, ¿se diferencia del que se produce fuera?

—Pienso que ahora no tanto. El pensamiento sobre el Caribe en la región cada vez se mezcla más con el que producen quienes viven fuera o quienes incluso nacieron fuera. Finalmente, creo que la manera en que todo esto se agrupa resulta en que no hay diferencia entre los de fuera y los de dentro. No hay un Caribe inmutable, en todos los ámbitos de la realidad antillana. Compartimos con gente de todas partes. El pasado es importante, pero más lo es el futuro. Y el futuro viene de la mano de toda esa comunión humana.

Su teoría sobre la “literatura caribeña” es muy singular, dice usted que no puede ser definida…

—No creo que exista una “literatura del Caribe”. Están la guadalupeña, la martiniquesa, la haitiana, la de Trinidad, la de Jamaica… Cada una es muy diferente y dice cosas diferentes. Es falso hablar de “literatura caribeña” como si quienes nacimos en el archipiélago tuviésemos que decir lo mismo. No, somos diferentes y decimos cosas diferentes. Incluso, no creo que tenga sentido hablar de “identidad caribeña”: existen múltiples identidades, identidades singulares. Sucede lo mismo con África. ¿De quién hablamos?: de Senegal, Ghana... Cada uno con un pasado, una evolución diferente. No existe “el África”, sino países africanos.

En su país, el hecho de que usted escriba siempre en francés ha provocado disgustos. Usted insiste en que no escoge el idioma en que escribe, sino que escribe en su propio idioma —Maryse Condé— y que el idioma no domina a quien lo habla. Pero todo idioma es también resultado de una construcción cultural, de poder…

—De acuerdo…

¿No ha sentido nunca que el francés no le es suficiente, como escritora, para aprehender una “verdad” del Caribe o de un ser humano que lo habita?

—El francés se ve como la lengua de la colonización. En el Caribe francófono, quien escriba en francés es un traidor y quienes lo hagan en créole, son vistos como más cercanos al pueblo. Es la idea de base y creo que no es justa. Lo que sucede en mi caso es que yo no me formé en el créole, sino en el francés. Tal vez yo pude haber escrito en créole y ser lo que ellos quieren; pero si he de decir “la verdad”, pues la verdad es que yo escribo en francés.

“Piel negra, máscara blanca”… ¿es eso posible?

—Soy un ejemplo de que eso ha cambiado. No me gusta criticar las cosas, sino tratar de entenderlas. Veo los orígenes porque ahí están las verdades.

Mirando un poco hacia esos orígenes, ¿cómo explica Maryse Condé que Guadalupe y Martinica continúen siendo departamentos de Francia, en el siglo XXI?

—Porque son pequeños países que no tienen mucha fuerza. Faltó un líder para llegar a la libertad, como el Fidel Castro que ustedes tuvieron. Se necesita un grupo de gente y un hombre o una mujer que lleven hacia la libertad. No hemos tenido eso. Los martiniqueses tuvieron una liberación —al menos cultural— con Césaire; pero nosotros en Guadalupe, fatalmente, no hemos tenido a nadie. Se estudia en las escuelas con libros franceses, la prensa es francesa, el cine… todo francés. La lucha es larga. Martinica y Guadalupe no son Cuba, no tuvieron una revolución.

Los escritores de estos tiempos, ¿no sienten una relación con el espíritu de aquella generación de Césaire?

—Siempre digo que mi generación fue más modesta y creo que aún se mantiene ese sentimiento. Para algunos países, el tiempo de la colonización terminó: para Cuba; para Guadalupe, no. Pero escribir es como alcanzar la libertad personal. Al menos eso, mientras dure.

Tomado de La Jiribilla

Tomado de La Ventana

Thursday, December 2, 2010








EN REBELDÍA

A Nazim Hikmet

“Los dedos bien abiertos
entre las notas de un teclado inexplorado…”
Eduardo Espósito

¿Por la sombra de cuál de estas palabras subversivas
puedo arriesgar
a que me corten la cabeza?
Aunque todas sin embargo
han prometido alinearse en mi defensa.
Pero ¿qué pasará cuando ellos lleguen
a tomar mi casa por asalto,
destruyendo mis archivos
e incendiando cada verso que encuentren?
Tendré que huir,
escoger mi propio destierro entre las ruinas
o las cenizas de tantos libros,
vivir de incognito al lado de mis peores enemigos
fingiendo no saber que les conozco.
¿En qué pedazo de palabra
esconderé mi cabeza
cuando venga por mí la noche ?


Daniel Montoly ©




EN REBEL•LIA

A Nazim Hikmet

“Los dedos bien abiertos
entre las notas de un teclado inexplorado…”
Eduardo Espósito


Traducción al Catalán del poeta Pere Besso


Per l’ombra de quina d’aquestes paraules subversives
puc arriscar
que em tallen el cap?
Encara que totes tanmateix
han promés alinear-se en la meua defensa.
Però qué passarà quan ells arribaran
a prendre ma casa a l’assalt,
destrossant els meus arxius
i incendiant cada vers que troben?
Hauré de fugir,
triar el meu mateix bandeig entre els enderrocs
o les cendres de tants llibres,
viure d’amagatotis al costat dels meus pitjors enemics
fingint que no sé que els conec.
En quin bocí de paraula
amagaré el meu cap
quan vindrà per mi la nit?

Daniel Montoly ©


ENTRE LA VIRTUD Y LA CERTEZA

A estos jubilados les sobra de plata
lo que les falta de cerebro.




Querido poema
te escribo porque desde hace un tiempo
no encuentro tu manuscrito
por ningún lado
después que hiciste enfadar
a tantas personas
por las meteduras de pata
de tus versos
con tu punto de vista
incómodo
tan poco correcto para sus gustos.
Me escribieron, quejándose
por el comentario
que hiciste
sobre “esos pobres jubilados ricos”;
jamás imaginé
que fueses a expresarte
de tan cruel manera, pero sabes
algo, admiro
que hayas sacado coraje
para ser tu mismo,
contrario a mí, que voy
buscando cómo esconderme
entre tus líneas, o, cómo jugar
a ser también tu víctima.


Daniel Montoly ©

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Wednesday, December 1, 2010


Libertad a CRISTIAN CAYUPAN MORALES y a todos los PRISIONEROS POLÍTICOS MAPUCHE.


COLOMBIA-Bucaramanga: Desde la tierra de Los Comuneros donde aún se escucha el grito libertario de José Antonio Galán, llamamos a los poetas del mundo entero, a las organizaciones internacionales y a los gobiernos de todos los países del mundo, especialmente al de mi país, Chile, a que se atiendan las reivindicaciones del avasallado y sufrido pueblo mapuche, a que se liberen a todos los prisioneros políticos mapuches, injustamente acusados de actos terroristas, fórmula inventada por el país más poderoso del mundo, que le permite perseguir a las mujeres y hombres que se opongan a su expansión en el planeta. Hoy, en muchos países los gobiernos aplican este procedimiento para justificar ante los ojos de la humanidad, la persecución y el enjuiciamiento de sus opositores, y Chile lo está haciendo con los hermanos mapuches.

La ONG-MUNDIAL Poetas del Mundo, gremio de poetas que agrupa a más de 7 Mil miembros de más de 120 países de los 5 continentes, nació para entre otras cosas, defender la JUSTICIA [única para todos], la IGUALDAD [efectiva entre todos los habitantes de la tierra], la LIBERTAD [la verdadera, no la artificial] y el DERECHO de los pueblos a existir y vivir en paz. Por eso, estamos organizando lo que será el PRIMER ENCUENTRO DE POETAS DEL MUNDO CAMINO AL SUR - UNE TRAWÜN WALMAPU WIRINTUKUFE WILLI RÜPÜ MEW,* actividad que se desarrollará del Sábado 19 al lunes 28 de febrero 2011 en Santiago, la capital chilena, la Isla de Chiloé y la Región de los Lagos, a más de Mil kilómetros al Sur de Santiago en pleno corazón del país mapuche. Ya muchos poetas de diferentes continentes, culturas o idiomas, han confirmado su participación a este histórico evento que pretende sacar la voz de los oprimidos mapuches, a través de la poesía, hacia el mundo entero.

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A continuación reproducimos aquí una carta de uno de los presos políticos mapuche, nuestro hermano Cristian Cayupan Morales.













Luis Arias Manzo
[Fundador-Presidente Mundial]
http://www.poetasdelmundo.com/verInfo_america.asp?ID=377
info@poetasdelmundo.com




María Inés Huenuñir Antihuala
[Embajadora - País Mapuche]
http://www.poetasdelmundo.com/verInfo_america.asp?ID=6918
huenuir@yahoo.es

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Carta Cristian Cayupan Morales dirigida a la opinión publica y al gobierno de Chile que lo mantiene Encarcelado hace Un Año

Mari Mari pu Peñi, Mari pu Lagmien.


Bueno mi nombre es Cristian Cayupan y aquí les escribo nuevamente a mis hermanos, a la opinión pública y en especial al gobierno. Este mismo gobierno que hace un año atrás [27 de noviembre de 2009] dio una orden que cambio mi vida.

Cambio mi vida digo, por que hace un año personal de la PDI llegaron a buscarme con una orden de arresto, cuando la única orden e intención aquí es destruir al pobre, al hijo de familia humilde, que ha sabido sobrevivir a un sistema injusto. Pero injusto solo para el pobre, y más injusto si pertenece a una familia con sangre mapuche y por ser mapuche a esta familia se le persiguió, se le arresto, me torturaron y no conforme con eso me privaron de mi libertad y me redujeron el mundo y mi felicidad en rejas y paredes.

Vi a mi familia llorar como si nuestros días de sueños y alegrías se hubieran muerto y como a un muerto, paso el tiempo, muchos me olvidaron, hicieron como si no existía y desaparecieron, porque esos que se hacen llamar amigos y te dan la mano, esos son los primeros en darte la espalda. Son igual que este gobierno, traicionero, que te sonríe y te apuñala, que nos persigue y nos mata, este gobierno que le importa sólo el dinero, porque para ellos vale más que los sentimientos y el vivir de las personas, más que el dolor de una madre que llora el recuerdo de su hijo, pero esas lágrimas son las que riegan nuestra esperanza de que pronto estaremos juntos, porque la esperanza es lo único seguro que nos queda, es la que me hace levantarme, en cada mañana abrir los ojos y ver que aun sigo firme y fuerte, como un ser de luz a un año ya en la oscuridad, pero en pie de lucha como un verdadero Weichafe luchando contra el tiempo y contra lo que me quiere destruir. En este caso el gobierno y su injusticia mentirosa, fiscales, jueces y sus testigos sin rostro que se prestan para condenar y callar la voz del pueblo y por eso nos tienen aquí por ser y pensar diferente.

Por eso decidí escribir esto a un año ya de mi injusto encarcelamiento, y ya que no respetan nuestro derecho como detenido, tampoco me tome el derecho a guardar silencio ante tanta injusticia, en contra de nuestro pueblo mapuche…

Libertad a CRISTIAN CAYUPAN MORALES
y a todos los PRISIONEROS POLÍTICOS MAPUCHE.
LOF MUKO… RESISTE.
MARRICHIWEW


NOTA:

La ONG-MUNDIAL 'Poetas del Mundo' [PPdM] es una organización de poetas que ponen su arte al servicio de la humanidad.

No estamos ligados a ningún gobierno o institución política, ni religiosa, ni de ningún tipo. En lo económico, somos totalmente independientes, no recibimos ayuda alguna para funcionar, nos autofinanciamos gracias al apoyo de algunos poetas que lo hacen de manera voluntaria. Participar en nuestro movimiento no tiene costo alguno.

Poetas del Mundo fue fundado el 14 de octubre 2005 en Valparaíso Chile, por el escritor chileno Luis Arias Manzo, en poco tiempo se convierte en el principal gremio de poetas del planeta reuniendo ya [NOVIEMBRE 2010] a más de 7 MIL miembros de más de cien países de los cinco continentes.

Uno de sus principales objetivos es convertir la palabra en una FUERZA REAL, capaz de influir en los destinos del mundo y en el equilibro del planeta.

En nuestro interior funciona un Cuerpo Diplomático Poético, el que debe darle funcionalidad a nuestras acciones poéticas en pro de la PAZ, porque visto el estado del mundo, es necesario que intervengamos en los conflictos que amenazan la estabilidad del planeta. La misión del poeta, de cada miembro, con título o sin título, es grandiosa, fundamental, porque su misión es cotidiana y permanente y no se enmarca en fronteras materiales que dividen a los seres humanos.

[*] DETALLES DEL ENCUENTRO CAMINO AL SUR - UNE TRAWÜN WALMAPU WIRINTUKUFE WILLI RÜPÜ MEW,* :

Español:
http://www.poetasdelmundo.com/verNot.asp?IDNews=2503
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