Al doctor Eduardo Umaña Mendoza
Al barrio
que está al otro lado del puente
llegaron ellas
sigilosas
en pleno apogeo
de los 90.
no esperaron
que las invitaran
a quedarse
para montar
sus madrigueras
en los recodos
oscuros.
poco a poco
fueron
dejando huellas
visibles
de frescos orines
en los muros
de las escuelas;
en lo peculiar
de su lenguaje
fijaron horario
para salir, entrar,
desayuno,
almuerzo
y cena.
nadie cuestiona
las reglas
del macabro
arreglo.
desde entonces
pasan cosas
inauditas
pero sin
altercados,
sin pintadas
de protesta
contra la ley marcial
de su “gobierno”
impuesto
a sangre y pólvora.
ahora los basureros
son morgues
anónimas,
los parques
lugares
a los que todos
temen. Y todo sigue en
“Paz”, en “Orden “
como en los cementerios.
Daniel Montoly©
0 Comments:
Post a Comment
Subscribe to Post Comments [Atom]
<< Home