Thursday, May 30, 2013


 La vida luminosa de Javier Heraud

“Honor a su memoria luminosa. Guardaremos su nombre bien escrito. Bien grabado en lo más alto y en lo más profundo para que siga resplandeciendo. Todos lo verán, todos lo amarán mañana, en la hora de la luz”

por Julio Yovera B.

El Perú de los 60s

Javier Heraud Pérez había cumplido 21 años cuando fue acribillado el 15 de mayo de 1963 en el río Madre de Dios, en Puerto Maldonado. Se muerte estremeció el ámbito intelectual, cultural y literario de la época. No era para menos, se trataba de un poeta laureado y reconocido; además, provenía de una clase media holgada y cultivada. Tengamos en cuenta que sus estudios secundarios los realizó en el prestigioso Colegio Markham y los superiores en la Pontificia Universidad Católica del Perú.

La opción de vida que eligió no fue resultado de marginación personal alguna, de resentimiento o desesperanza, sino producto de su amor, su solidaridad y sus ideales.

La sociedad peruana llegó a la segunda mitad del siglo XX con manifestaciones abiertas de convulsión social y de polarización política entre cambio radical o conservación del estado de cosas. En la estructura económico-social la presencia del capital imperialista (Cerro de Pasco Corporation, Southern Perú Mining, Nothern Mining Corporation, Marcona Mining Corporation, International Petroleum Company) era hegemónica. Al mismo tiempo, la clase feudal terrateniente concentraba en el 83% del total de la tierra cultivable de los Andes. (de La Puente).

En ese convulsionado escenario la clase obrera luchaba por mejorar sus condiciones de vida y los campesinos, a su vez, iniciaban una serie de acciones orientadas a recuperar las tierras que les habían usurpado. La sociedad semi feudal y semi colonial, rigurosamente investigada por José Carlos Mariátegui, estaba gestando una crisis que hacía avizorar el probable advenimiento de una situación revolucionaria.

Las organizaciones, conscientes de la gravitación del ande y de las zonas rurales, fijaron su atención en el Perú rural; el objetivo era organizar al campesinado, levantarlo a la lucha y convertirlo en protagonista de su libertad. Se asumió que abriendo escenarios guerrilleros, las masas campesinas ocuparían su lugar y “tomarían el cielo por asalto”.

En el escenario internacional, los pueblos del mundo luchaban y algunos triunfaban y sentaban las bases de un nuevo orden. En Cuba, en China, en Vietnam, en Angola, en los países de centro América, la lucha armada era no solo una posibilidad sino una ruta.

En la década del 50 el país estaba gobernado por la dictadura de Odría. Los partidos existentes eran molde del orden establecido. El APRA no obstante el sacrificio de algunos de sus líderes, asesinados unos, en el destierro otros, perfilaba contradicciones y ambigüedades. Esta conducta llevó a su juventud a la creación de una fracción que se conoció como APRA Rebelde y que lideró Luis de La Puente; después tomó el nombre de Movimiento de Izquierda Revolucionaria, MIR. Los líderes del Partido Comunista también fueron al destierro. Su problema mayor provenía de una lectura sectaria y dogmática, que demostraba cuán lejos estaban del pensamiento del Amauta José Carlos Mariátegui.

En el 60 se formaron los sindicatos campesinos, Lares y La Convención, en el departamento del Cusco y fueron una demostración que el campesinado empezaba a convertirse en clase consciente, en sujeto social histórico. En 1962 hubo elecciones generales, Haya de la Torre resultó vencedor en esta contienda; la derecha no aceptó los resultados, y, nuevamente, se instaló un gobierno militar presidido por Pérez Godoy primero, Lindley después.

Las organizaciones políticas de izquierda, por propia experiencia dedujeron que la vía democrática electoral era inviable en sociedades retrógradas. Se aceleró entonces la formación de organizaciones de carácter político militar: el Movimiento de Izquierda Revolucionaria, El MIR, el Frente de Liberación Nacional y el Ejército de Liberación Nacional. De ese proceso surgieron personajes como Javier Heraud, Edgardo Tello, Héctor Béjar, Alaín Elías, Guillermo Lobatón, Máximo Velando. Los dos primeros conocidos por su estela de poetas y por su destino de guerrilleros asesinados por los “descuartizadores de la luz y el canto” (Zeballos)

El río de Javier

Javier Heraud tuvo lo suficiente para “sentirse realizado”. De haber sido indiferente nadie le hubiera enrostrado nada, pero su ser lo empujó a cultivarse en la solidaridad. Fue un convencido que la felicidad debía pertenecer a todos y, de no ser había que luchar para conquistarla. Eso lo llevó a hermanarse con los que sufren; a dar residencia en su corazón a las causas justas; a portar sobre sí una parte del destino de todos, y rebelarse contra toda forma de injusticia.

De otro lado, era innata su capacidad para crear una forma de poesía que la crítica literaria saludaba. Lo suyo era canto puro y por ello nadie habría sospechado el menor atisbo de vocación guerrillera en su alma de poeta. Nadie leyendo su poesía abría sospechado que en él habitaba un hombre dispuesto a subir al monte y tratar de acabar con ese orden que lacera por siglos la vida de los pueblos.

Sus poemas son cantos a la vida, a las estaciones, al río, en él encontró y desarrolló, mejor que nadie la metáfora exacta para compararlo con su devenir vital. Si los versos de Jorge Manrique refieren que: “nuestras vidas son los ríos, que van a dar a la mar, que es el morir”, Javier se encargaría de describir el ciclo completo de ese río que fue ―que es― su vida, e hizo una obra hermosa e intensa. Leamos los siguientes versos:

Yo soy un río un río
un río cristalino en la mañana.
A veces soy tierno y bondadoso.
Me deslizo suavemente
por los valles fértiles,
doy de beber miles de veces
al ganado, a la gente dócil.

Los niños se me acercan de día,
y de noche trémulos amantes
apoyan sus ojos en los míos,
y hunden sus brazos
en la oscura claridad
de mis aguas fantasmales.

Yo soy el río.
Pero a veces soy bravo y fuerte
pero a veces no respeto
ni a la vida ni a la muerte.

En este poema Javier Heraud se mostró como un maestro del lenguaje, combinó imágenes que captó con su mirada de poeta y, al mismo tiempo, hizo aflorar desde su mundo interior emociones y conceptos implícitos, llenos de vitalidad y de coherencia. A la vez que tierno se mostró apasionado y amoroso pero también bravo y enérgico.

Poética y compromiso social

Heraud llegó a la política por los caminos de la poesía; de ello no debe deducirse que la utilizó simplemente como un medio pues no es así. Hasta cuando se adentró a cumplir su destino de guerrero, su poesía fluía de su espíritu y adquiría naturaleza propia. En una conversación que sostuvimos con Jorge Heraud, hermano del poeta, nos refirió que éste era un ser brillante, muy agudo e inteligente, pero sobretodo, sensible y dotado para la creación.

Si nos atenemos, en estricto, a la obra poética de Javier advertimos que no hay atisbos explícitos de esa poética confrontante, a lo Maiakovsky, que caracteriza a algunas corrientes poéticas militantes y que, deliberadamente, convierte a la poesía en trinchera o en puño poético de clase; que no significa en modo alguno que sea mala poesía, por lo menos no en el caso del poeta soviético. Veamos:

Adelante, automóviles!
¡Al mitin, motocicletas!
¡Lo pequeño, a la derecha!
¡Ceded el paso a los camiones!
¡Los caminos se pusieron en fila india!
Escuchad lo que dicen los caminos

¿Qué dicen?

Nos asfixiamos de tanto viento y polvo,
retorciéndonos en los rieles por estepas hambrientas.
Por dóciles kilómetros sin empedrar,
estamos hartos de arrastrarnos tras los presidiarios.
Queremos saturarnos de asfalto,
ceder bajo el peso del expreso.
¡Levantaos!
¡Basta de dormir
carreteras mecidas por el polvo!
¡Vamoooos!
(Fragmento del poema “150,000”)

Esta expresión poética nos retrae una barricada obrera. En cambio, la poesía de Javier Heraud no tiene esas características, al contrario, es sencilla; no buscó la complejidad, ni la forma ni en el contenido. Cuando publicó El río, en 1960, la crítica de todos los tonos lo saluda y le augura un porvenir luminoso. Ese mismo año, con su poemario El viaje, compartió con César Calvo el primer premio en los Juegos Florales “El Poeta Joven del Perú”, que convocaba el escritor Marco Antonio Corcuera, promotor de los “Cuadernos Trimestrales de Poesía”.

Javier Heraud fue docente en la Gran Unidad Escolar “Melitón Carvajal”. La vida de los hombres trascendentes tiene hondos recodos y misterios. Heraud fue probablemente el docente más joven del Perú, y algo más, fue profesor del Colegio Nacional “Nuestra Señora de Guadalupe”, es decir, en la misma institución donde, cuatro décadas atrás, un hombre iluminado por el fuego de la poesía se dedicaba a la educación de los niños. Ese hombre se llamaba César Vallejo.

La obra del poeta Heraud quedó trunca. Cecilia, su hermana, ha dicho:
    Javier no tuvo oportunidad, la vida no le dio la oportunidad de madurar su poesía, no en el sentido de que la poesía que él escribiera fuera inmadura, no, sino que él pudo llegar a un sitial más, mucho más elevado. Javier tiene una poesía muy sencilla, pero a la vez muy honda, era un trascurrir de vivencias, de pensamientos que los hilvanaba. (Vida y muerte de Javier Heraud)
Aquel joven que se sentía río, miró a su pueblo ya no solo con ojos de poeta; con la ayuda de la teoría marxista se detuvo a mirar las noches sin lunas de los parias, el abandono y la tristeza de los pueblos. Fue entendiendo entonces que había un poder que asfixiaba los sueños e impedía el progreso. Decidió entonces actuar, simplemente no quería ser “el hombre triste, que agota sus palabras”.

Se interesó entonces por la actividad política, ingresó al Movimiento Social Progresista, creyó encontrar la opción que buscaba. Viajó a Europa, a Moscú y a China. Se entusiasmó con la construcción de lo que hasta entonces era la experiencia más terrenal de una sociedad nueva.

Mario Vargas Llosa, cuando aún era un escritor con ideales, dijo del poeta:

“Su entusiasmo político estaba acompañado de un enorme entusiasmo literario también. Estaba muy entusiasmado con Bertolt Brecht, con la idea de una literatura que de alguna manera reflejara convicciones políticas nuevas”. (ob. Cit.) Destinos tan opuestos los de ambos. Javier Heraud ascendió en convicciones e ideales y Mario Vargas se hizo un escritor afín al sistema.

Después de cerca de dos años de militancia en el Movimiento Social Progresista, Javier renunció; lo hizo de manera firme y serena:
    No había salido aún de las filas del Movimiento Social Progresista porque me quedaba una última esperanza: la de entrar en el cauce de la verdadera Revolución, aquella que se enraíza en la ciencia y tiene vigencia universal. Infelizmente ha sucedido todo lo contrario. Ni la Revolución de la que hablan sus dirigentes es la Revolución Proletaria ni el Socialismo que pregonan es el Socialismo Científico. Se carece de una ideología seria y el reformismo campea por doquier” (ob. Cit.)
Decidió ingresar al Frente de Liberación Nacional. Cuba fue su motivación. A ella se dirigió, en 1962. Su propósito era estudiar cine. En la Cuba de Martí y de Fidel entendió que las palabras no bastaban, que la poesía si bien es un relámpago maravilloso, una fogata libertaria, no son suficientes para acabar con un orden injusto. Estaba en su camino, en su opción. Heraud se hizo guerrillero.

Decidió ingresar con sus demás compañeros por Bolivia. En plena travesía por el río Madre de Dios fue sorprendido y acribillado. Se ensañaron brutalmente contra él. En ningún momento las fuerzas represivas dejaron de disparar proyectiles cuyo uso estaban prohibidos cuando de seres humanos se trataba.

Heraud asumió ese destino no porque le gustara la violencia, menos por una postura de heroicidad “poética”. No. El poeta se fue convenciendo que frente a una clase dominante, que no le interesaba en absoluto el destino del país ni el bienestar de las mayorías, las gestas guerrilleras eran decisivas para abrir nuevos caminos.

Porque la patria es hermosa

Al poeta se le puede calificar de soñador, de romántico, pero no de ser un vulgar violentista. Además, su decisión de irse al monte estuvo dictada por el amor a los que sufren. Lo dijo de manera muy precisa en este poema que firmó como Rodrigo Machado, su nombre de combate:

Pero voy al combate y a la guerra
por amor a mi patria, a mi Perú,
por amor a mi suelo, a mis paisajes,
por amor a los pobres de mi tierra,
por amor a mi madre, a sus cariños,
por amor a mi padre, a sus durezas,
por amor a hermanos y amigos,
por amor a la vida y a la muerte,
por amor a las cosas de los días,
por amor a los días del otoño,
por amor a los fríos del invierno.
No sé qué pasará conmigo y mis
hermanos en la lucha,
pero supe vivir y morir como
hombre digno,
queriendo respetar y salvar al que
todo lo sufre,
quiero abrir nuevos soles salvadores.
El final de la historia lo dirán
mis compañeros
arriba, abajo, encima de la historia
y contarán a mis hijos
historias verdaderas,
y para siempre vivirá la esperanza


Pocos como él. Desde los tiempos de la lucha patriótica de Mariano Melgar no se conocía historia parecida. En todos los periodos el oficio de poeta es motivo de sospecha, y el de poeta revolucionario es peligroso. La lista es larga, Edgardo Tello, Otto René Castillo, Roque Daltón, Miguel Hernández, Federico García Lorca, son conocidos entre nosotros, pero hay muchos más.

Javier Heraud es un ejemplo para una juventud que al acerársele lo encuentra puro como un río no contaminado, sólido como “un cedro fuerte y perenne”, tierno “como un trémulo amante”. El poeta es un ejemplo de lo que significa ser joven, no solo desde el ámbito político, sino desde la condición de hijo, hermano, amigo, ciudadano.

Como dijo Pablo Neruda: “Honor a su memoria luminosa. Guardaremos su nombre bien escrito. Bien grabado en lo más alto y en lo más profundo para que siga resplandeciendo. Todos lo verán, todos lo amarán mañana, en la hora de la luz”.

No concluiré esta nota sin decir que Javier Heraud es un ejemplo de pureza y de desprendimiento, de amor y de sacrificio. Sabemos que sus padres sufrieron una enorme y profunda herida. Tuvieron, sin embargo, el enorme orgullo de saberse progenitores de un hijo noble, que los amó en todo instante, que amó a su pueblo siempre.

Los restos mortales del poeta ya no están en Puerto Maldonado, ahora reposan en un lugar que es accesible para que la familia y los amigos visiten a este eterno joven que, además de revolucionario fue poeta, aunque quizás sea más exacto decir que este extraordinario poeta fue, además, un auténtico guerrero.

Y así como sus padres siempre lo sintieron vivo y así como sus hermanos sienten que Javier está con ellos:

Mamá, papá,
he vuelto.
Hermanos,
aquí estoy
como antes,
cantando en
las noches
del invierno,
con mi seco
corazón
de pan y piedra.


Así también los hombres que no han renunciado a los sueños sienten que Javier está vivo y también están vivos sus ideales.

▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪

CARTA DE JAVIER HERAUD A SU MADRE

Nov 62. La Habana. Cuba.

Querida madre:

No sé cuándo podrás leer esta carta. Si la lees quiere decir que algo ha sucedido en la Sierra y que ya no podré saludarte y abrazarte como siempre. ¡Si supieras cuánto te amo!, ¡si supieras que ahora que me dispongo a salir de Cuba para entrar en mi patria y abrir un frente guerrillero pienso más que nunca en ti, en mi padre, en mis hermano tan queridos!

Voy a la guerra por la alegría, por mi patria, por el amor que te tengo, por todo en fin. No me guardes rencor si algo me pasa. Yo hubiese querido vivir para agradecerte lo que has hecho por mí, pero no podría vivir sin servir a mi pueblo y a mi patria. Eso tú bien lo sabes, y tú me criaste honrado y justo, amante de la verdad, de la justicia.

Porque sé que mi patria cambiará, sé que tú también te hallarás dichosa y feliz, en compañía de mi padre amado y de mis hermanos. Y que mi vacío se llenará pronto con la alegría y la esperanza de la patria.

Te besa
Tu hijo
Javier

▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪ ▪

• Fuentes consultadas: Conversación con el Ingeniero Jorge Heraud Pérez, Vida y muerte de Javier Heraud, de Cecilia Heraud Pérez (Mosca Azul Editores), Historia del Perú, Edición de Juan Mejía Baca, Poesía de Vladimir Maiakosvski, fotocopia. Ensayo sobre la sociedad Peruana, de de La Puente, Luis, tomado de: http://www.marxists.org/espanol/delapuente/1964/rev-peru.htm. 


Tomado de La Ventana.

Saturday, May 25, 2013

VOCES DEL SIGLOXXI: CATALINA BOCCARDO



VOCES DEL SIGLOXXI

CATALINA BOCCARDO
 (Capital Federal, ARGENTINA1961)

 


diálogo con kazuo onho *

tus mujeres lucen un sombrero
travestido
enjuto
y a sus flores les falta seguridad

variedad del rictus
mórbidamente blanco
kasuo onho

máscaras
que nunca había visto arder

tus mujeres lloran
ríen
tocan la nunca de vez en cuando
la almohada

y otro physique du rôle

sobre puntillas el trance
del músculo
las medias de nylon
chis chis al tocar
así bonitas
( cuando nosotras calzamos nuestra propia vida)

tarso metatarso

las contracciones
paren
los huesos

forma de flor
calcáreo jazmín

 ( Del libro: Bailar)





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*Ohno nació en 1906 en Hakodate, una ciudad del norte del Japón. De joven fue atleta pero, en 1929, asistió a la representación de la bailarina Antonia Mercé, experiencia que marcó su vocación hacia la danza. En 1938, el ejército de su país lo convocó a que se sume a las filas y, después de la derrota japonesa en la Segunda Guerra Mundial, fue prisionero en Australia. Sólo en 1946 retomó los estudios y su primer espectáculo data de 1949. Cinco años después conoció a Hijikata, con quien inició una etapa sumamente productiva. A los 71 años fundó su compañía y a los pocos años sus trabajos comenzaron a girar por el mundo. Su influencia superó la barrera de la danza. Algunos afirman que tanto Madonna como Marilyn Manson toman elementos del maestro para sus shows. O, por ejemplo, el disco The Crying Light , de Antony and the Johnsons, tiene en su portada una foto de Kazuo Ohno,
Junto a Tatsumi Hijikata, interrumpieron la tradición del teatro noh y el kabuki tomando elementos del expresionismo europeo. Pero, a diferencia de Hijikata, el mensaje de su danza transita las aguas de los enigmas e interroga las definiciones de belleza y muerte recurriendo a movimientos lentos en los que el cuerpo casi está pegado al suelo o en cuclillas y las manos se despliegan como alas rituales… Fuente: www.lanacion.com  3 de junio de 2010




clases de butoh





                                                                             “nuestro cuerpo muestra nuestra vida”

                                                                                                   tadashi endo

                                                                                       

                              “no hay que parecer una flor, un animal, hay que ser la flor, el animal”

                                                                                                             tadashi endo





1



arranca sus colgaduras
las extremidades

cuántos obstáculos la parte baja
indagaremos

la voz de tadashi

tensa flores de cerezo manos
                                                    hacia arriba

explica la sustancia de un árbol danza
para sus alumnos


2

“siempre la danza sale de adentro”
quietos entonces sientan el temblor

hay un tiempo justo me digo

“sin hablar sin hablar”

y este es mi cuerpo y duele

3

la que baila

los pasos más tenues del gato
y la potencia de un caballo

no voy a poder

he olvidado cuándo percibe un animal

4

mis patas de arrastre

la espalda se cierra y se abre enojada

lo último humano

¡muertos!

una parálisis
ni siquiera el pestañeo
musculares

cumplamos su idea
                         morir como gatos

(no vemos)                       
la entraña desgarrando la danza



 ( Del libro: Bailar) 





tadashi baila un homenaje a sus muertos  *



golpetazo del pecho

se bambolea
el metal


nos aproxima


oscuro estentóreo


por favor un stop


un choque el fogonazo

de las lobotomías
sobre la butaca


cadáveres de Fukushima                 de Hiroshima


zumban los intercostales


y hacés bien en desnudarte
deberíamos


arrancar los orbiculares
el esternocleidomastoideo


danzar butoh
ampollas de sangre


cuántos enterrados
padecieron de verse a sí mismos


doscientos voltios
mil voltios multiplicados por orden
de unos psicópatas

la tortura zumba

elástica


un convite


el músculo frontal

esa lámina entre las manos*


el contacto de la materia tadashi

 ( Del libro: Bailar)




*Tadashi Endo, referente mundial de la danza butoh, discípulo de Kazuo Ohno,  presentó en la Ciudad de Buenos Aires, su espectáculo “Ikuro-Vivir. Homenaje a Pina Bausch.”, en agosto de 2012.  Así recordó a Ohno y a su amiga Pina Bausch. También dictó un Seminario convocado por Gustavo Collini Sartor, experiencia maravillosa que pude transitar durante una semana. Días más tarde, Tadashi se presentó en el ECUNHI (Ex ESMA), y nuestro Nobel de la Paz, Adolfo Perez Esquivel le entregó un premio a su trayectoria.

Luego de terminar la función del 25 de agosto, Tadashi Endo, dijo al público, que al momento de ocurrir el desastre de Fukushima, se enteró unos instantes antes de salir a bailar en un teatro de Río de Janeiro. Dudó en hacer el espectáculo por la enorme tristeza que lo iba embargando, pero finalmente se decidió. Allí él con los muertos de Fukushima, sobre el escenario. Los bailarines de butoh siempre danzan con los muertos, nos dijo (recordar la escena de la película “Las flores del cerezo”, en la que la jovencita explica que baila con su madre fallecida y la hace sentir menos sola). Y finalmente,  Tadashi, con una bata vistiendo su desnudez,  pidió por la memoria y la paz en el mundo.


los bailarines (1)



       Necesitaría acostumbrarse, creo yo, para poder llegar a ver las cosas de arriba.”

                                                                      Alegoría de la Caverna. Platón



 “en aquellas épocas sólo había luz de las antorchas, una luz irregular y temblorosa…
 la película intenta mostrar que sí, que las cosas se mueven realmente…

                                             W. Herzog sobre La Cueva de los Sueños Olvidados





su amnesia de cuerpo

( la antorcha flamea el inframundo

salen de cavernas
estirándose
hacia la perfección)

el pájaro verdadero sobre el escenario

                    vuela
                            a la medida de las cosas 


 
 ( Del libro: Bailar)



cordeles



                     Desde que el espíritu está en litigio, todo está en litigio; todo

                    está en desorden y toda reacción contra el desorden es de la misma especie…”   
                                                                            Paul Valéry

                                                                                                      



el cordel ata los tobillos
unos músculos estrechos
“estoy” cerrándome en desorden

 necesito la metáfora              el baile
cuestión de vida  
o (el cuerpo de la) muerte

“estoy”
la conjugación de ningún verbo
otro cordel ambula y
titubea

 ( Del libro: Bailar)




pina bausch

                                                                      

 a Philippina Bausch (1940 - 2009),bailarina, coreógrafa y profesora de danza



tanta belleza las piernas
acabaré de escribir movimiento

una cinta eléctrica
unas cabezas
medusa
loca

jadear empujar verbos pina
acción
voluntad

los hombros pesan

espina dorsal enhiesta
adelante una pelvis el escroto

“tienes que seguir buscando”

tu luz se baila la sombras
                              gestás algo

 ( Del libro: Bailar)




macbeth por julio bocca


líneas sobre el blanco
la mirada de ella fuerza tus cejas

el des-doble

bruja fatídica

 traición
                           envidia

me hacés bailar

de la víctima al victimario
                                   doble el juego

manos rojas de pintura julio
                            o julia
no tiene la mínima importancia
salvo el ropaje (tampoco interesa
falda bella
un pantalón ajustado)

configuración
                             (en varias escenas)

hay que elegir
                    se elige
                                             una obra


 ( Del libro: Bailar)



maya plisetskaya *





tan trémula maya
irás con la muerte
ensimismada
cortarás los brazos de luz del teatro

nada
la noche no es nada más un momento
escapan cisnes como bailarinas
fuertes y tensas
y arrullan lagrimales de polvo

pero no
no es verdad
nada escapa a este lago de artificio

nos sumergimos
más reales que la propia muerte


 ( Del libro: Bailar)





*Maya Mijáilovna Plisétskaya, de nacionalidad rusa-española, nacida en 1925, maravillosa bailarina de la que se dice ha realizado una de las mejores interpretaciones en “El lago de los Cisnes” así como de la “Muerte del cisne”, entre tantas otras obras. 



cisne





la madre gustaba

punta de pie
enaguas

“si hubiera podido…”
 y dejaba ir
sobrevolar

no sé por dónde ese nureyev*
esa plisétskaya*
encontraba cisnes

y el agua ahora
absorbe mis piernas
me aletea
                      una remota cavidad de plumas




 ( Del libro: Bailar)



*Rudolf Jamétovich Nuréyev, nacido en la Unión Soviética (1938-1993), talentoso bailarín y coreógrafo de excepcional perfección sobre el escenario, quien realizó nuevas adaptaciones en el rol masculino de la danza clásica, en las que además profundiza aspectos psicológicos de los personajes. 

*Ya citada en un poema anterior.






expresión corporal


                                                   "La manera de danzar que lleva el sello de cada individuo. Comparándolo con la poesía de cada poeta. Por medio de este quehacer queremos ayudar a que el cuerpo piense, se emocione, y transforme esta actividad psíquica-afectiva en movimiento, gestos, ademanes y quietudes cargados de sentido propio." 
(Patricia Stokoe*,[] 1987)



                                              



semidesnudas
nos contorsionábamos
un patio repleto de piernas
saltos
otra vez al piso mugientes

y reprimidas y temerosas

aquellos años setenta*
freían el cerebro
quedabas con la dura cicatriz de un fascista

por eso la dulce prueba
la imaginación

si ser otras
nos convertía en nosotras mismas

más que la realidad
los ejercicios de expresión corporal*
daban a las niñas sus músculos

aprendías
“hay una pelvis
libre de cercos

sus bestias enlazan la asfixia
para siempre”


 ( Del libro: Bailar)





*Patricia Stokoe, bailarina y pedagoga argentina (1919-1996), creadora de la Expresión Corporal-Danza,  introdujo la disciplina de la Expresión Corporal en nuestro país con la idea de democratizar el acceso a la danza.

*Argentina padeció diversos períodos de dictaduras en el siglo XX, y a partir de 1976, el último régimen dictatorial, nos sumía como sociedad en el horror de campos clandestinos de concentración que aún siguen develando sus historias de tormentos, homicidios y desapariciones en los tribunales. Salvo cortos períodos de gobiernos electos, muchos atravesamos nuestra infancia y nuestra adolescencia sin conocer la libertad de expresarnos sin miedo. 


*Expresión corporal. Como expresión artística se basa en una disciplina en la que a través de formas creativas se interpretan emociones por medio de nuestros movimientos: inconsciente y conscientemente. La idea principal es sentir libertad en la ejecución de cada movimiento.







                                                                                                    escupo oráculos frente a tu puerta

                                                                                                                                                           DIANE DI PRIMA




despertás  un millar de leguas

tu materia vital quieta

ahí  apunto perezosa la mirada de pájaro hambriento

a nada podemos rebelarnos
ni ondularme dentro de tus brazos
quetzalcóatl de maíz

ilusorio

¿por qué tu pena?
¿por qué los escondites?

esos campos de tu abuela
la perenne
ojos de refugio
la del pelo en lluvia

puso el fruto azucarado tus encías
panes rojos del día de los muertos

un camino de ajíes y cebolla y frijoles

el baño termal

tu cuerpo son especies
mi cuerpo almíbar con una flor extraña

existen piel y glándulas

espíritus
dictan nuestros nombres
de arroz dulce
la carne de los puercos

y el augurio equivocado
pájaro y serpiente

frágiles se masturban
se tocan la pared del tiempo

resurrección sin salvarnos

la violencia de estar sagradamente vivos

( Del libro: Territorios)



hemos amanecido
plantas de vidrio encendidas
                                        por un vendaval

manos a punto
nos socorrimos
nos prometimos salvación

medio muertos
la tierra nos tragara

es irremediable
una mujer y un hombre toman
sus cuerpos hasta el último sorbo

( Del libro: Territorios




un cuerpo
dejé el vestido y que observaras

un cuerpo

la cobertura de las cosas

clavaste puñales intangibles

esa mujer mayor
que no dijo la edad
y  vos amaste

la apertura de las piernas
a veces muestra
la finitud                     el terror



 ( Del libro: Territorios)





            el arco 
                                                               a kim ki duk





               1



          inmóviles
los dedos tensan un retorno

          aérea
        suspendida
la desnudez se pliega
                      en cada acierto

los ojos muerden la elipsis
el arco no dubita
es
su propio blanco

                2

         humanos
barca solitaria
del límite
su piel

y el resguardo

esta pulsión
flecha tierna
última



hierro 3 


                                                                  a kim ki duk


del golpe 3

su desliz corporal



las manos tocan

una pelotita

en el estómago

dicen basta

o no dicen



es amor_ me digo

luego de observar

algunas posibilidades



que la policía llegue

dónde la morada

mientras el corte

sangra menos



la casa vacía

un buen sitio

y no atiendas el teléfono



por ese infalible enojo

contra tu boca         o deseos

que no puedas reprimir



el corte

sangra menos

con su ausencia

                                                       
 ( Del libro: El jardín santo)

©Catalina Boccardo
Catalina Boccardo, nació en 1961, en la Capital Federal, ARGENTINA, y reside allí. Egresada de la carrera de Abogacía de la U.B.A.. Ejerció en el área de Violencia Familiar. Dictó cursos y seminarios sobre la temática en diversas instituciones públicas y privadas. Profesorado Universitario, UAJFK. Posgrado en “Mediación y Negociación”, UBA. Cursó la especialidad en Violencia Familiar, UMSA. Ex ayudante ad-honorem del Patrocinio Gratuito de la carrera de abogacía. Ex docente de nivel terciario. Fue integrante del Comité de Bioética de la SAU. Ha presentado trabajos sobre derechos de pacientes-niños en Jornadas de Bioética. Invitada al Encuentro Interdisciplinario sobre Juicios de Delitos de Lesa Humanidad organizado por la UCES en 2010. Docente y Tutora de Nivel Medio. Como poeta: Publicó los libros de poesía “el jardín santo” por Ediciones en Danza, 2011, y “territorios”, editorial Del Dock, 2012. Integró los grupos-taller “Gente de Lunes” y “El tren de la palabra”. Participó de las  V Jornadas Literarias, y en el  Encuentro de poetas en la ciudad de San Pedro, Bs. As. , en 2007. Intervino en el Primer y en el Segundo Festival de Poesía en la Escuela en Buenos Aires. Participó en la lectura en el Congreso de DDHH y Salud Mental, 2010 en Buenos Aires. Su poesía aparece en diversos blogs, fanzines, revista virtual, y en la Antología “Gente de Lunes”, 2006, Casa de la Poesía de la CABA. Fue invitada a diversos ciclos de lectura de poesía. Se dedica a la fotografía y colabora activamente con con varios blogs literarios tantos nacionales como internacionales.
Publicó el microrrelato “Sangrar” en un libro objeto en la Cuarta Edición, Foro de ediciones contemporáneas del Museo de Arte Carrillo Gil, por editorial (c)acto ediciones, México.
Y en la actualidad tiene dos obras de poesía en preparación.



Nota del autor del blog: Las fotografías que ilustran esta antología breve de la poeta argentina, 
Catalina Boccardo son propiedad del artista visual y poeta valenciano, Gonzalo
Pueden acceder a su página web en el siguiente enlace: http://www.vbz.es/vbz.htm





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