Tuesday, July 31, 2007

Fiel a sí mismo fue Virgilio, que supo ver ese sentido de insularidad que es nuestro espacio, prisioneros del mar, como somos los hijos de las islas

por Uriel Medina

Irreverente, irónico, iconoclasta… varias íes para calificar al más importante dramaturgo que ha tenido el teatro cubano en toda su historia y que en agosto hubiera cumplido 95 años de vida. Aunque y en esto como en tantas otras cosas, me viene a la mente una frase de Martí, sobre la muerte y la obra de la vida… porque nadie que ha dejado una huella tan profunda, como el autor de Electra Garrigó y Aire frío, puede morir.

Él, como sus versos, lleva la “isla en peso”, desde el aliento irrepetible y único del escenario, el que pobló sus noches y sus días y al que se consagró con verdadera pasión, como lo hizo también con sus cuentos y novelas, para dejar una de esas obras fundacionales dentro de nuestro imaginario colectivo, clave cuando se habla, en puridad, de la identidad cultural.

Hombre singular, ajeno a las capillas y a las tendencias, consecuente con su vida y con su escritura, nos dejó la lección de su magisterio desde una poética muy personal, no sometida a los ismos ni a las circunstancias de la moda, siempre iluminado por su capacidad reflexiva, no exenta de sarcasmo ni de choteo, incluso cuando se adentraba por los senderos del teatro del absurdo.

Fiel a sí mismo, coherente y emotivo, subjetivo hasta el tuétano, así fue este cardenense que supo ver, como pocos, ese sentido de insularidad que es nuestro espacio, prisioneros del mar, como somos los hijos de las islas.

De familia muy humilde, pero voluntarioso, ascendió hasta realizar sus estudios universitarios con matrícula gratis y proclamar su existencia desde su inclusión en aquella ya obligada antología La poesía cubana en 1936, que debemos al poeta español, a Juan Ramón Jiménez, en la que está Virgilio con su poema El grito mudo.

Temido por sus enemigos e incluso por sus amigos por su mordacidad, Virgilio Piñera trasciende la finitud humana, gracias a su obra y deviene clásico de la literatura cubana, como lo demuestra su poesía desde aquellos primeros versos, editados en la revista Espuela de Plata (1939-1941), que dirigió José Lezama Lima, como en Verbum y Nadie parecía, antecedentes de Orígenes (1944-1956).

Electra Garrigó fue el gran salto, desde su revisitación de una tragedia griega, para situar una lectura desde su intrínseca cubanía. Como se manifestaría también en el ensayo, con sus textos sobre Emilio Ballagas y el propio Lezama Lima.

Pero será su extenso poema La isla en peso, el que lo sitúa dentro del panorama de la lírica cubana del siglo XX, al romper con esquemas y fórmulas, defensor vehemente como siempre fue de su propia estética.

Buenos Aires sería otro de sus espacios, para el proceso de su creación literaria y allí publica su novela La carne de René, como los relatos de sus Cuentos fríos y comienza a escribir otra novela, Pequeñas maniobras, mientras en la emblemática Sur se publican sus cuentos La carne, La caída y El infierno.

Al triunfo de la Revolución, Virgilio se adueñó del periodismo y fue columnista y crítico en el periódico Revolución y en su suplemento Lunes de Revolución. Y dirige el proyecto de las Ediciones R, gracias al cual aparece la primera edición de su Teatro Completo.

En diferentes medios como el teatro, la televisión y en el mundo editorial dejaría su huella este hombre, que no llegó a vivir siete décadas y que recibió por su obra Dos viejos pánicos, también el Premio Casa de las Américas, así como después, desde el virtual anonimato, nos dio otra lección de su cultura, su trabajo como traductor en el Instituto del Libro.

Tomado de Juventud Rebelde
Reproducido de La Ventana

Monday, July 30, 2007

Canzone fellini



Ay de los hiperbóreos gatos
del ambarino Vístula,
ay, de los gatos del Shangri Lá
omniásticos y videntes.

Ay de los gatos de Karnak
guardianes e intérpretes,
sombras prudentes del ronroneo fúnebre.
Ay, de los gatos equilibristas
ahogados en el Yang Tsé
y aparecidos intactos en Nazca y Titicaca.
Ay de los gatos del jordán
que no ayudan al trasiego como los perros
y prefieren esperar en la otra orilla
con su garra hipócrita.

Ay del gato inmolado en todo barrio,
mártir de salem
y amuleto para impacientes.
Ay,
de los gatos todos,
escuadras sigilosas, falanges indomables,
herederos de un mundo
que se irá de cabeza, mientras ellos,
parcos y serenos, caerán siempre
de pie.



VASA, 1628



Pasé
catorce horas de vuelo para llegar a ella
y ella,
cuatro siglos bogando para atracar en mi asombro.
¡Ah, bestia boreal de lo imprevisto!
Me contaste de ballenas que pelearon
a canto vivo tus cuadernas,
de las salvas de silencio
con que espantaste sus ardores
y del día aquel
en que la última gaviota se prendió a tu mástil
y arranco las velas como un recuerdo.

¡Cuántos abedules para abrazar tu casco!
¡Cuánta premura para entrar en los sueños!

Báltica joya en la ostra de los inviernos,
limpia de hombres, vacía de voces y contraordenes
conservaste para mi
un corazón de laberintos y espejos,
el adios perdido de los reyes
y un mascarón de proa, vacío
para este amor de lejanías.

¡Ay, Alfonsina escandinava!
coral de museo,
momia marina que jamás
revelará mi pecho.


EN LAS GALERAS


Yo serví en las galeras contables,
amarrado a la silla
empuñaba el lápiz remando
en contra del cifrado mar de horas y cierres.

El sol teñía la mitad del rostro
mientras el ventilador henchía los papeles
con su soplo hastiado.
A la altura de los pájaros
que se estrellaban en los ventanales,
imaginaba que el edificio entero levaba anclas
y dejaba atrás
las nubes de un cielo petrificado.

¡Cuántos salarios pasaron
como esqueléticos peces multiplicados!
¡Cuántos memorandos silbando
como látigos en mis manos!

Yo serví en las galeras contables,
restándome, borrándome,
batiéndome manso en la espuma de las tardes.



HOMBRE SECULAR



Todo está en contra del hombre secular:
La marea que truena
en los silencios de la palabra,
la fruta ácida que se encuentra
en medio de la sed,
la órbita sorprendida por Newton y Copérnico
y que ahora, entre los simios,
es el dogma de las esferas;
la veloz ráfaga que viene de los calendarios
y el otoño de días y horas
donde gira el inconforme,
el universo fragmentado
ante la primera pregunta del niño
y ante el sueño precoz de los astrónomos.
Todo está en contra
del que va desnudo
con un arreglo floral para el forense,
las enormes vitrinas bajo las cuales
surge el amor de los ciegos,
los símbolos patrios, el candado de las fronteras,
el tañido escrupuloso de las campanas
que avisan el desastre,
la prudencia de los anarquistas,
la bala que se oxida
en la ruta sanguínea de lo tiempos;
la limpieza de la muerte,
la nostalgia inútil de los ebrios
recién casados,
el soltero que desgusta
los platos fríos de la soledad,
la polilla que engorda de luz
en las bombillas abandonadas,
los burdeles donde se ama con uñas y dientes
con un amor más tierno que el de los enamorados.
Las oficinas del tedio,
la oración cifrada
en la administración de Dios,
el goteo de santos y blasfemos,
los que esperan una llamada
o un signo de fe trás la orgía,
los que buscan empleo
para ser objetos de burla
o simple objetos de inventario.



POEMA EN ONDA CORTA



Con la radio venía la revolución.


Por las noches, cuando mi abuela dejaba
el responsorial y la estación católica
interrumpía su señal,
la radio quedaba a la deriva
en la curiosidad del niño:

¿Quiénes eran los santos furibundos
y quiénes los mansos pecadores?

"Condenamos
la grave orientación de la revolución vietnamita
y el leve alzamiento de la revolución filipina.
Condenamos
la lejanía que advertimos en la revolución sandinista
y el tímido apoyo de los afganos
a los tanques soviéticos.
Condenamos
el marasmo en que camina la revolución en Polinesia,
y la interpretación vaticana a la furia del italiano.
Condenamos
la pésima interpretación de los comandantes búlgaros
y la casa de caracol donde duermen
los comandantes albanos.
No hay duda que la doctrina jamás será superada,
así, que también condenamos
el enfriamiento de la pasión
en los camaradas moscovitas
y el calentamiento prematuro
de las Panteras Negras en Louisiana..."

Con la abuela, llegaba el fin de la revolución.
Siempre me atrapaba trasnochando,
cambiaba el dial y me reprendía.
Con tres padres nuestros olvidaba,
según ella,
el evangelio prohibido
que ya se filtraba en mis sueños.

Poema que la muerte espera
Nada es para siempre,
aceptémoslo,
Lo eterno se inventa
para no vernos acabados.

Nada dura más tiempo que una vida,
sólo las aves creen que el planeta es infinito,
sin imaginar que su vuelo
es inferior al de los astros
y que estos, a la vez,
un día se opacan
y surcan vacíos el silencio
como el corazón de un hombre
que ha dejado de amar.

Por ello, cuando sé
que el amor es el primero en morir,
no dejo de sentir una extraña alegría,
saco una silla al patio
y entre las flores,
dejo a los gatos atrapar
y matar mariposas
en su juego.


Fabricio Estrada.

Nació en Sabanagrande,
Francisco Morazán, Honduras, en 1974.

Tuesday, July 24, 2007

Mireya Robles
Guántanamo, Cuba 1934.
Poeta invitada en El Wrong Side.



Pidámosle silencio al miedo


Pidámosle silencio al miedo
tu ausencia rompe el asombro
para doler de cerca
hiere en vuelo:
punto tiempo horizonte madrugada
Pidámosle silencio al miedo,
que no suene en el cordón de mis zapatos
cuando digo: niña, corre, el abecedario a cuestas
y en el plano inclinado se descarna
tu muerte
en el dos tan frágil de la tarde
Jugabas a llorar tempranamente
sin dedos para contar el aliento de los otros
y tú, tan niña, muriendo eternamente
Escucho, golpe a golpe,
las horas me despiertan
y digo, muerte, Neruda,
y aún no la conoces
y sigues muriéndote hacia dentro
un poco, hacia dentro.


Nunca podría rechazar a esa mujer


Nunca podría rechazar a esa mujer
que viene por el largo camino
con su verdad entre los dientes
con su verdad azul como un trapo virgen
abanderando su dignidad
recogida en un arrullo del desierto
alimentada de hambre
cuadriculada en esa espera
donde ya no acechan los buitres del tiempo
su sombra dilatada en la distancia
Si todos los puntos
donde habíamos de encontrarnos
han sido devorados por aquellas visiones de Patmos,
cuando todo se haya exterminado
cuando los últimos granos de hierba
hayan escapado de la tierra,
iré cabalgando en la ira
de esta pobreza inútil
excavada para el yermo
Sólo el silencio entonces
sólo este silencio mío
buscando entre los muertos
tu silencio.

Me había acostumbrado a los latidos.


Me había acostumbrado
a los latidos,
la semioscuridad,
el acto de alimentarme
por el hueco del ombligo
pero sonó la hora
una contracción
y otra
y me sentí girando
en mi acurrucamiento
Las fuerzas empujaban
mi cabeza
que rompió los líquidos
y los hilos del tiempo
El aire sorprendió
mi cara
y oí mi primer grito
que se quedó colgado
para siempre
a mi piel.

Más allá de la distancia


Más allá de la distancia
en un precipitado convivir de esta pena abreviada
se me vuelve el polvo abandonado
un pasillo que dice ausencia
y un concierto es la campana que enmudece
como el grito cansado de los tenis
cuando voy cabalgando en una tarde
y los precios me rodean
y se venden utensilios y banderas
y un niño grita ya su chocolate
y la boca del reloj se me hace grande
y me regreso.


DE LOWERY A LA 33

Llegamos a la estación,
el coche de los muertos
se prepara para el ruido
Nos señala el niño colombiano
con su índice agorero,
se come a dentelladas las palabras:
"Estos son los cadáveres
de bocas marcadas de silencio"
Los huesos de los dedos
buscando las manillas
y mi ojo recorriendo
la larga caverna en movimiento
Nos envuelven las paredes
hasta hacernos mugir extrañamente
en este Auschwitz eterno,
de consumo.
Vino así, a galope

Vino así, a galope
la cara desvalida de los vervets
cerró la noche
El tiempo se negó a las horas
cuando olvidamos hoy de señalar
el paso que siempre fue del otro
y mi voz encuadrada
en filos y bordes
de ventanas amarillas
Sabes que me voy:
los abrazos son kilómetros,
el descanso se parece a la muerte.


Sudáfrica
Marzo 13, 1986

Vi tus huesos

Vi tus huesos
escarbando las pieles de Dios
tu forma peculiar
de obsesionarme
Vinieron tus labios al abrazo
cuando tus dedos abiertos
me dejaban ir
y te alejabas
No me viste escapar
por el brillo de tu pelo
Si es que llegué a destiempo
y lo sabes y lo sé
y tu lengua es ofrenda a Krishna
y es buscarme en pedazos de universos
escondidos en su transparencia.


Virginia Beach, Va.
diciembre 28, 1983


APUNTES PARA UN AUTORRETRATO SIN OLEO

La definición
no es válida
cuando estás
al borde del camino
y omito autorretratos
para seguir diciendo:
"et pour vous, madame,
une rose"
y contemplo mis pasos
desde la piel de mi sombra
vacía de palabras
hasta que un viernes circular,
a golpes de rayuela,
otras bocas me recuerdan
que aún existo.

Sunnyside, New York
marzo 23, 1984
viernes, 1:30 PM


DIOS

Me dijeron que venías
en un pedazo de pan
a pegarte a las papilas
de mi lengua
Nunca me hablaron
del vacío que dejaste
entre las pieles de mi pecho
Nunca me hablaron
de la luz que señalan
tus caminos
para el viaje de regreso
Nunca me hablaron
de tu ceño preocupado
y tus palabras:
perdónenme, hijos míos,
no es mi error
ni es falta de mi parte,
es que estuve algo distraído
y he dejado fermentar
las raíces de ese árbol
que borraron mi imagen
de sus mentes.

LA SOLEDAD SE ALARGA POR UN CAMINO
QUE YA NO CONDUCE A OZ

Me miro en el espejo
y me devuelvo la mirada de mí misma
Otros párpados, cerrados, conjuran silencio
En mí,
el gato que ladra por el pincho atravesado en la garganta
el perro que maúlla sus discordias a la luna
Ante esta anchura,
salto un requiem para la muerte
salto un requiem
salto
hasta que nacen ojos
en las páginas que escribo.

Sunnyside, New York
septiembre 3, 1984

Cuando sólo se llenan las horas


Cuando sólo se llenan las horas
y la vida vacía
y en la boca el polvo
y la alegría de otro
y siempre aquél
y siempre el otro
y yo en el sudor de mi camisa
y el pan no ha llegado todavía
y nos mordemos las venas hasta sangre
y siempre el caminar del mediodía
y la cabeza baja
y en cada ceja el hambre
y siempre deshabitando pasos
siempre deshabitando
hasta mirar de frente este vacío.


Vamos a correr esta etapa


Vamos a correr esta etapa
de inquieto silencio
donde duerme la noche
con tintes de estrella
Vamos a posarnos en ese borde
--cualquier borde--
y descansar el perfil de alas
en un beso martilleado
en la configuración del Tiempo
Pasarán las ramas
llamándonos al lenguaje
de palabras forjadas
en un gesto del aire
Y desde allí
tu voz llamándome al destierro
de todo aquello ajeno
al gesto cotidiano
que me nombra,
que te nombra.

Se abre el día


Se abre el día
a una luz
de claridades sumisas al aturdimiento
No hay palabras sueltas
entretejiendo juegos de locomotoras
danzando en domingos-promesa
Algo se me duerme dentro:
Hoy no distribuyo mis panes de tristeza
ni sermones de resurrección
Entreabro los ojos
en ángulos vacíos
y empiezo
a desconocer el mundo

Guardo de ti

Guardo de ti
el gesto de abrocharme
la camisa
tu forma de cuidarme
en estos plazos de tiempo
Yace-yace
el asombro de la noche
humedad-beso:
has rasgado la penumbra
Existe:
el amor sin preámbulos
del más reciente
nacimiento nuestro
saltando etapas
que describimos
con la palabra-cero
Sólo el verbo-aliento
colgando en el aire
descifrando la muerte
de nuestra soledad.


Una promesa


Una promesa
sólo una promesa
en la voz del aire
integrando tu sonrisa
a este salto de tiempo
El tren que pasa
llevando en las ventanas
las caras de tu aliento
y una carga de palabra presa
en el corte de tu mano
Has llegado mañana y llegarás ayer,
si está demás el concierto sonoro
de los tiempos
y el verbo en armonía
es un capricho de academias
El café, cereales, el polvo de los libros,
el silencio de los muebles
y yo, contándome estas células
que esperan el brillo de tus ojos
para formarme.




Mireya Robles fotografiada por Tania Spencer Nació en Guantánamo, Cuba, el 12 de marzo de 1934. Pero en la actualidad es ciudadana de Estados Unidos. Realizó estudios en el Instituto de Guantánamo, Cuba de donde se graduó como Bachiller en Ciencias y Letras; más tarde en la Universidad de La Habana, Cuba, cursó durante dos años la carrera de Derecho Civil e Internacional. Una vez en los Estados Unidos se formó entre Instituciones como el Russell Sage College, Troy, New York: B.A.; University of New York at Albany: M.A. y University of New York at Stony Brook: Ph.D.

Como profesional ha enseñado en varios colleges en U.S.A. y fue Senior Lecturer, University of Natal, Durban Sudáfrica desde 1985 hasta 1994. En la actualidad es Investigadora Asociada Honoraria de esa universidad.

Ha publicado numerosos artículos de crítica literaria, poemas y narraciones cortas en revistas literarias en unos 20 países. Obras originales escritas en español. Selecciones traducidas al francés, al inglés, al portugués, al catalán, al vasco, al italiano.

Destacan entre sus libros de poesía: Petits Poèmes, en traducción francesa, Niza, Francia, 1969; Tiempo artesano, Editorial Campos, Barcelona,1973; Time, the Artisan, edición bilingüe, trad. Angela de Hoyos, Dissemination Center for Bilingual, Bicultural Education, Austin, Texas, 1975; En esta aurora, Universidad Veracruzana, México, 1976.

Sus novelas publicadas son: Hagiografía de Narcisa la bella, Ediciones del Norte, Hanover, New Hampshire, 1985; y Editorial Letras Cubanas, La Habana, Cuba, 2002; Hagiography of Narcisa the Beautiful, trad. Anna Diegel, Readers International, Londres, 1996; La muerte definitiva de Pedro el Largo, Lectorum, S.A. de C.V., México, 1998; Una mujer y otras cuatro, Editorial Plaza Mayor, San Juan, Puerto Rico, 2004.

Ha escrito además el libro de crítica literaria: Profecía y luz en la poesía de Maya Islas, M & A Editions, San Antonio, Texas, 1987. Y tiene inéditos en versión de papel la novela Combinado del Este, los libros de cuentos: Trisagio de la muerte y Frigorífico del Este. Además del poemario Solitarios del Silencio.

Ha obtenido los premios literarios: Mención de Honor por el ensayo, “Determinismo y libertad en Jacques le Fataliste”, Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York, 1969. Mención de Honor, ensayo, “Arte y Filosofía en Muerte y Resurrección de José Ortega y Gasset”, Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York, 1970. Finalista, poesía, “Poemas del Tiempo”, Ciudad de Barcelona, España, 1970. Mención de Honor, ensayo, “En torno a Luis Cadalso”, Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York , 1970.

Mención de Honor, ensayo, “En torno a Luis Cadalso ”, revista Xilote, México, D.F., 1970. Primer Premio, libro de poesía, Tiempo artesano, Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York, 1971. Segundo premio, cuento, “Trisagio de la muerte”, Sigma Delta Pi, Sociedad Nacional Hispana, Universidad de Maine, Orono, 1973. Segundo premio, cuento, “Hidra ”, revista Silarus, Battipaglia, Italia, 1973. Finalista, cuento, “Frigorífico del Este”, XXV Concurso de Cuentos La Felguera, La Felguera, España, 1974. Medalla de Oro por tres libros: La desnovelización de la novela (ensayo); Frigorífico del Este (cuentos); Tiempo artesano (poemario), L'Academie Internationale de Lutèce, París, Francia, 1974. Finalista, libro de poesía, Solitarios del Silencio, Premio Juan Boscán, Barcelona, España, 1974. Finalista, poesía, “Devuélveme”, Diario de León, León, España, 1974. Primer Premio, ensayo, “La relatividad de la realidad”, Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York,.1974. Mención de Honor, poesía, “ Nunca podría ”..., “Cuando sólo se llenan las horas ”..., “Pidámosle silencio al miedo ”..., “Otra vez estas flores de mármol ”..., Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York, 1975. Finalista, cuento, “Grand Central”, Periódico La Verdad, Murcia, España, 1975. Segundo Premio, cuento, “En la otra mitad del Tiempo” , revista Silarus, Battipaglia, Italia, 1975. Mención de Honor, poesía, “ Feelings ”..., revista Amanecer, Buenos Aires, Argentina, 1976. Accesit, artículo de periódico, “Kendall”, Premio Jorge Mañach, Miami, U.S.A., 1976. Una mujer y otras cuatro, novela, entró en el grupo de las seleccionadas para la obtención del Premio Nadal, 1989.

Mireya Robles comenta: “Comencé a escribir poemas y narraciones cortas a los 13 años de edad. Poemas borrascosos, desolados. Pero también amo el sentido del humor que se manifiesta en mis novelas. Me río con mis personajes y me divierten las ideas inesperadas que se les ocurren. Además de escribir me apasiona viajar. He viajado por varios países y he vivido en Cuba, U.S.A. y Sudáfrica.

Sudáfrica es un hermoso país que amo. Llegué a Johannesburg el 13 de julio de 1985. Al día siguiente, en el avión de South African Airways que me llevaba a Durban, oí La Guantanamera . Sentí que me daban la bienvenida. Sentí que una puerta se abría para mí. Una puerta a un mundo nuevo en el que muchos mundos convergían en uno solo.”

Selección compilada por la poeta María Eugenia Caseiro.
Obra: Musa menguante

Álvaro Antón



Viuda


En su libro de memorias
dos flores de sándalo:
una señala la página de los puentes,
otra la de los suicidas.

--Bernardo Atzaga--


Estas gaviotas, que son nocturnas
e impulsan el corazón
al precipicio,
arrastrando entre sus alas
las últimas imágenes,
de los viejos tiempos.
Legajos corroídos,
no por la sevicia del reloj
sino por la insana ingratitud
de la memoria-
viuda y ramera
que siempre matiza de negro
los ocres rostros de los suicidas.

Daniel Montoly © 2006

Friday, July 20, 2007

FUEGO SOBRE EL MADERO

Después de romper el áspero
castrante
hostil
cerrojo de las ataduras
apuñalé al pecado
cayendo agónicas
mis trabas y mis culpas

Dejé de pedir permiso para vivir

Disponiendo conocerte
abrí tus brazos en cruz
—cristo de mis pasiones—
y hundí el sabor
de mi presencia
en tus pies
en tu cuello
en la blanca playa de tu espalda

Recorriéndote fui creciendo
hoja de tu rama
rama de tu árbol
árbol de tu bosque
hoja loca al vaivén
de tu tronco elocuente

Empinando a la fiebre
mi despertar
caminé y rodé en tus cumbres
y tu sexo brotó
dejando su vasta lluvia
en mi rezumante tierra nueva.


PLEGARIA AL ORGASMO

Ajeno a mis pensamientos
huiste a un casto silencio

Hoy
que sedienta mi sangre te busca
ni a golpes ni a ruegos
te insinúas

enajenado prosigues
riguroso y oprimido y largamente oscuro
como pasillo de convento desolado


ángel de dura delicia
apático orgasmo rebelde
erizado temblor
pólvora vulnerable

regresa a mí
y aniquílame


TESTAMENTO

Porque fuiste reto desmedido
a esta alegría
que no me terminaba de nacer
y no teniendo a la vista
otra vida
sino la que desgastan
mis pasos y mis horas
te designo albacea
de mi último suspiro


EXPLORADORAS


Tus manos
siempre encuentran en mi piel
una senda inexplorada
para zarpar con rabiosa gana
a la apetecida boca
del relámpago carnal

tus manos
saben evadir la rutina
cuando las pienso
se humedece mi memoria
e impaciente las aguardo

ORGASMO I

Nerviosa la hora parpadea
ante el tiempo que se ahorca

me rodea me cava me lame
una dicha sin tamaño ni fondo

mis dedos agonizando
en tus costados
se pierden con el mundo
en un suspiro

ORGASMO III


Se calla la luz
el sonido se apaga

el aleteo de un grito
deja caer sus plumas
en nuestro lecho

tus ojos desplomándose
sobre mi cuerpo vencido
me están escoltando al delirio

LA INCÓGNITA

Sin patrimonio ni domicilio
descifro mi nombre
en el tropiezo de los mapas

El color de mi voz es un riesgo
y una espiral que me lanza
al suburbio de los proscritos

No consigo sanar mis distancias

Y aunque quisiera coger
el timón del olvido
he de seguir

bajo los puentes rotos
rescatando
adioses inservibles

única posesión de los vagamundos


LOS LAZOS

Hay en la calle
olor a vidrios rotos
y en el aire
embriaguez de quemadura

Te hundes
en el vientre de la casa
palpas sus llagadas paredes
-entrañas que sin pudor
te muestra la sala moribunda-

La enferma voz
de las bisagras
te habla
de los nudos ciegos
de las ausencias

y alucinado escarbas
por unas cenizas
enlazadas a tu nombre

BESO III

Caótico preludio
quemando voces
opacando voluntades
a la vez que dos lenguas en pacto
remueven hondo combate


DINA POSADA
El Salvador en 1946






Wednesday, July 18, 2007


EULER GRANDA
(Riobamba, Ecuador 1935)


Las cosas

son otra cosa debajo del pellejo.
Así;
la sed es agua amordazada;
el olvido
es el recuerdo con candado
la música es flor con alas;
los que nacen ahora
son los muertos mañana;
el hoy es el ayer;
la verdad
es la mentira más cerdosa;
el amor
no es más que el desamor con piel de oveja.

("El amor")

Eso es el tiempo

Ni la muralla china
ni el alambre con púas
ni los cordones de perros policías
o policías perros
que resguardan las nalgas sociales y cristianas
del hot dog presidente,
nada es capaz
que yo sepa,
nadie puede detenerte.
Ni las minidevaluaciones,
ni la maxi hambre,
ni todos los bostezos juntos de la burrocracia,
ni la inflación,
ni la desinflación,
ni la deuda externa:
ajena mortecina
que nos cargaron en la espalda;
ni el patriotismo a sueldo
de las fuerzas desarmadas de la patria,
ni las redes del miedo con que a río revuelto
pescan las religiones;
contigo no se puede:
a todos y a todo
nos pasas por encima; a todo matas;
todo lo pulverizas,
lo desmemorias todo;
a todos nos conviertes en morcillas
para las aves de rapiña;
todo no es más
que una decrépita palabra
escrita en la arena movediza del cerebro;
eso es el tiempo
y no huevadas de relojes.


Poema sin llanto

Hoy mataron a Juan el Huasicama
lo mataron a palo en día claro,
lo mataron por indio,
porque trabajaba como tres
y nunca sació el hambre,
porque junto a los bueyes
arrastraba el arado,
porque dormía sobre el suelo
y con su mala suerte cobijábase,
porque amaba la tierra
como la aman los árboles;
lo mataron por bueno,
por animal de carga.
Se quedó
de los pies hasta el alma ensangrentado.
se quedó boca abajo
para que los trigales no le vieran
la cara destrozada,
quedó
como las hierbas
después que pasan los caballos
y nadie dice nada;
lo mataron sin que nadie lo notara,
sin que a nadie le importara nada.
El viento persistió en su erranza,
como siempre las aves revolaron,
siguió impasible el soledoso páramo.
No hubo más,
el patrón lo mató
Porque le dio la gana.

Érase lo que se era

"Gringo:
El odio engendra odio.
Los monstruos paren monstruos." (Grafiti)

Entre latas doradas,
Mc Donals,
Soles de chicle,
Halloweens de plástico,
Entre telas de araña
Del FBI, la CIA,
Capuchas Ku Kux Klanes,
En un país que diluviaba Coca Cola,
Erase que se era
Una bestia bermeja
Un engendro hocicudo,
Una hidra genocida
Que destripaba flores,
Babeaba libertad y democracia
Y a punta de masacres
Se devoraba al mundo,
Hasta que un día vino un ángel
En forma de mosquito
Y le tumbó los cachos.
Era de ver
Cómo rodaron por la tierra
Esos sanguinolentos fetiches del abuso.
Era de ver cómo se desataron
Las furias del averno
Cómo sus coletazos y bramidos
Estremecían al planeta;
Pero nada había que hacer,
Con sus Supermanes, sus Mujeres maravilla,
Sus Batamans, sus Guasones,
La gran bestia quedó preñada de la muerte.

Laguja y el camello

("Es más fácil que un camello pueda atravesar el
ojo de una aguja antes que un rico entre en el reino
de los cielos").

Si se enterasen mis congéneres
que a mí sin ser camello
me es dado atravesar el ojo de una aguja
y que es un juego fácil.
Si comprendieran
lo que es trocar en hilo la grasa del abdomen,
los gordos pensamientos
y el tumor de los lunes.
Si tan sólo supieran en dónde está el ovillo.
En realidad
si fueran mis congéneres;
si tuvieran los ojos para ver
y no para patear;
si en lugar de espiar con el estómago
comieran simplemente,
llanamente comieran
y siguieran comiendo
y establecieran premios para los más glotones
e inofensivamente así,
sin meter los zapatos en los platos ajenos.
Si mis iguales,
mis diferentes semejantes,
los que funcionan como yo
y sin embargo
más que yo rebuznan.
Si supieran los nudos que me hago
y que buscarle
cinco patas al gato
es como sonreírse sin los dientes.
Si supieran
me digo:
que dos y dos son cinco,
que la línea más corta
no es la recta
y que no queda en pie de los axiomas
ni la aseveración rotunda,
ni Pitágoras.
Si supieran no más
que yo ya no soy
sino un primo lejano
que se quedó aplastado bajo un sueño
y desde entonces
algo como un violín
le está goteando adentro.
Si supieran las cosas que yo escribo
desde este barrio sin desagües
donde nos estancamos todos
y la luna se aborta empantanada.
Si supieran las cosas que no escribo
y las cosas que escondo en las rendijas;
si supieran no más,
os doy por descontado,
no pasaría nada.
Además
qué carajo,
qué reino de los cielos,
qué flor
ni qué camello;
los ricos
mientras más barrigones,
con más facilidad
entran a cualquier hora dondequiera.

La droga

La más inofensiva,
la más sana,
la que nunca produjo salpullido a nadie;
la que hasta ahora que yo sepa
a nadie le ha pasmado la alegría;
la pájara,
la pajarita
que nos hizo volar sin ser aviones;
la que a mansalva nos hizo sudar miel,
quedar absortos
hasta sacar en conclusión
que el mundo lo teníamos cogido
como a una lagartija por el rabo.
Ese licor,
o si usted lo prefiere
esa licora
que nos hizo espumear sin ser cerveza,
que nos hizo calor en pleno frío.
La rica,
la pura gozadera
que no daba adicción
ni efecto de rebote
ni sueño dependencia
y así todo al respecto.
La bizca,
la bizcacha,
la tuerta,
la tuertacha
que nos hacía ver todo bonito y de colores
Esa descabellada primavera,
ese frescor sin nombre,
ese aroma sin cara,
esa borracha borrachera
que nos exacerbaba el apetito
para que devoráramos las fechas y las calles.
Esa droga, ese placebo
que no era cocaína,
ni peyote, ni crak, ni L.S.D. ni marihuana;
esa droga que en nada coincidía con un ave
y sin embargo era más ave
que las aves.
Esa destartalada,
esa chúcara fruta
que nos hacía sufrir delirios de grandeza,
alucinaciones, vahídos
y sin embargo teníamos
Más salud que los toros.
Esa recontramuerta,
esa enterrada viva droga de la juventud.

EULER GRANDA



Poeta y médico. En 1961 obtuvo el Premio Nacional de Poesía "Ismael Pérez Pazmiño" de Diario El Universo de Guayaquil; en 1987, en Lima, le conceden el Premio Internacional "Jorge Luis Borges"; en 1988 el Municipio de Quito le otorga el Premio "Jorge Carrera Andrade". Según el escritor catalán, Julián Gustems, "Euler Granda es un ejemplo de lo que un poeta puede decir todavía, un poeta que sabe dónde ir y qué camino debe tomar para ser leído. Sus temas hablan de las cosas que nos preocupan, que están a nuestro alcance, que entendemos bien, que nos son comunes. Sus poemas y la forma clara con que hablan merecen nuestra atención."

Fuente: Internet

Tuesday, July 17, 2007

TRES POEMAS DE TERESA CORASPE


"Toda la tarde esperando que el Café Bretaña
reparta su carga: …esperando que el azar
resuelva una continuidad”

Santiago Silvestre
Café-Taberna

Esta tarde te espero en el Café-Taberna
me sentaré cerca del Bar para ver cuando entras
mientras una taza de café sube el humo
hacia la chimenea
Arde el fuego y sé que te acercas
Escucho mientras tanto a Bessie Smith
con ese tono tan suyo de triste en el Blues
te sientas y toco tus manos con la punta
de mis dedos
me preguntas qué escribo y respondo que nada:
sólo invento una reunión, dije.
Tú y el café fueron uno y algo más
cuando la noche irrumpió de pronto sobre tu piel
marrón oscuro ¡tan blanca!
No recuerdo haber dicho alguna palabra
que no fuera mirarte
reconocerte en el silencio
traté de no olvidar tu risa
apenas sonreí
ví cuando iban una a una apagándose las luces
y cerrando las puertas
había amanecido desierto el Café-Taberna.

Teresa Coraspe, poema del 15 de Julio, 2007


Al borde de la noche, (dos poemas de Lou)


Si te digo que vengas
que la vida no está en ninguna parte
sino en tus brazos
que por ti tejo y destejo el tiempo
si te digo que vengas que aún te espero
es porque aún te espero.

24.o1.07


EL HUMO


Humo deslizándose
hacia donde el viento lo devuelve y lleva
sin poder detenerlo jamás

va girando
en los confines remotos
desdibujando en el horizonte
signos ciegos
y la noche que cae

es un torbellino de alas asfixiadas

19.06.o7



TERESA CORASPE

Monday, July 16, 2007

Gloria Dávila , Poeta invitada en El Wrons Side




Gloria Dávila
1961, Huánuco, Perú


REDOBLE PARA EL DERECHO UNIVERSAL ABSOLUTO


¿Qué derecho tiene el pobre si viene un gran pez
y come a mansalva en el nombre de su hambre?...
...No hay derecho hermano, señores no hay derecho,
sólo el hecho de que abramos los ojos de una vez por todas y jamás
deberemos ser sardinas.
No hay derecho para esta mi piel cobriza
si no hay un cobre,
no tengo una sombra.
Ni siquiera a ser polvo hay derecho,
porque una tumba no es tuya,
¿entonces para que morir acaso? Intentándolo, no puedo.

Ni siquiera a leer un texto hay derecho,
allí van y están los Misti Runas,
el pan es primero.

¡¡¡Derechu...!!!
¿Maypara ayhuargayqi gam?
gam niqashqanqi...
qampataq noga rurashqaga say derechu
maychomi qayqan say...
Ma,qaypa shamuy Taita, trolita...
Nogatapis wanushqaga qanan.

¿Runa simitaq mana yachasiq?
¿Imanir?
¡¡¡Imanir...!!!
Gelley mana qaptin, taita
¿imataq rurayqushaq?
Wawatapis mana yachansu,
nogatapis,llapantapis,
yawartapis mana qansu qanan taita
lichitapis munayqaga, tantapis...
valortapis wanushnani qanan.

Tú dirás..., Sacarás pecho!...
Y de qué sirve, sino de dar trabajo al aliento
por gritar a todo pulmón
Libertad bermellón,
Pan azul,
Justicia colorada;
verdad del color de la selva.

Hoy, sólo tienes derecho
a ser un mendigo de pan, rodando por las calles,
una justicia como el cáncer duro
y a acaso no, a leer un cartel... ¡No hay vacantes!
A ese contexto pertenecemos,
sufrida población,
los desnutridos,
los muertos de hambre
los sin oportunidades
los tercer y cuarto mundistas
los parias y segregados

Ay Apu con muru punchu,
mayparami aywuargayqi qam?
qaypa shamuy taita...

¡¡¡Ama RUNA ama, ama suwanqisu...!!!
Ama llullanqisu, ama
qaypaga noga shamushqaga qanan
runa shimitaq yachachinayqipaq
tantata miqunayqipay.


Transfiguración de piel


Danzo
al compás:
de mambas
del hielo
del fuego
de la hiel
alzando corazas
hechas de sulfuro
a miradas frías
al ver mi piel
roce
a la eternidad
para ser...
sol
luna
tierra
aire
fuego
agua
en tanto
espuelas doradas
escudan mi sopor.

Tingo María, 24 de junio 2007


Prohibido llorar vientos hollín


Me duele...
...el dolor,
¡Ay, cómo me duele...!
cantos testados
en réquiem,
epitafios
a memorias perdidas
a pieles impuestas al fogón;
escalinatas al viento hollín.

Me duele...
...el llanto
¡Ay, cómo me duele...!
son silbidos de cuervos al acecho,
pasos en zanjadas al abismo
en brazos de un ángel de la sombra.

Duele el dolor...
... ¡Ay, cómo me duele...!
son persecuciones
a mi andar
impuestos en guillotinas filosas,
anacoretas
e insinuantes...
gólgotas preñadas de espanto.

¡¡¡Dolor cómo me dueles...!!!
...Ay. Cómo duele,
no es más ésta mi piel
ni saliva mía,
son abanicos de piedades
sin mas
ni más...
mientras mis nervios
son trenes en marcha sin fin
anquilosados a su cáliz sin fe,
porque el pútrido pan
es olvido a mis fauces;
suspiro en tañido de campanas,
caminantes...
al compás sombras:
cenizas,
pardas,
ocres,
amorfas,
arrieros de mi suspiro
magma al carbón
hiel de su propia hiel.
Tingo María, 29 de junio 2007

Surcando el averno


Fluyo en el espacio ignoto
cercenando mi efigie
que a grescas
se ha batido
para ser hélice
de huracanes
convexos.

Diluyo en tanto mi sonrisa
al tiritar de cuerpos
asomados al fuego
hecho estalactitas
y estalagmitas
en simbiosis
con el oculto
amanecer
de escenas
que en síntesis
es sólo magma
del eterno.

Susurro mi voz
al eco defragmentado
de una noche ardorosa
por ser escalinata
del jubileo
cincelando mi estratosfera
cubo de una silueta
oscura
ágrafa
amorfo
simulando
tañidos
de campanas
silentes
al eco único
mientras
mi ocaso es
piedra
inoculada
e irisada
de amapolas negras.


Fuego del cadalso a ojos vacuos de amburana cearensis

Soy...
moud,
muud,
hammaca...
hamaaaaaaaaaaaaaaca...
...amburana cearensis
hija y madre,
padre y abuelo
de
loros machacos
pumas,
águilas,
jaguares
y caimanes
deslizándose dócilmente
en anatomías de cuerpos
tupidos de pigmento en arco iris
de aire puro
en simbiosis.

Soy
fuego
y sombra
si tú lo quieres
hamaca,
cruz,
cadalso
o portal de luz
bebida de
calma
de guerra
y látigo de
fuego
hielo
tibio
y candente.

Soy...
esencia
de tu vida
de tu muerte,
de tus ojos
que hoy son
gruesas
gotas de ríos
en raudas caídas
de plata
o diamantes ocultos
en tupidas selvas vírgenes,
y tú vienes
mezquino
y resumes
mi cuerpo
a páginas antiguas
de alcobas
de alelí
orquídeas
o
nauseabundos olores
repleto de alcoholes
en tanto
oigo el canto
de mis tristes aves
que a mi puerto arriban
dibujando sonrisas
hecho sólo ecos
que a tu razón
le son
nada o poco;
indiferentes.

Soy la Madre Diosa del Mundo,
soy...
esfinge elemental
ritual de imágenes
Iaooooo,
Iaaaaaoooooo...
alma primordial,
soy del viento la cumbre
y de la mar sus profundas aguas.

Hoy...
te miro desde aquí,
desde mi elaborada sabia
en sumun de raíces
fundidas en tierras profundas
entre ronsocos,
jabalíes,
shapajas
setas rojas
añujes,
manatíes
que en danza triunfal
pipean
el humo del toé
pero,
eso soy si lo quieres
y
acaso no
tus manos
tus garras
pezuñas
tu cuerpo
y mente
tu magma
y etérica esencia
pero,
no olvides...
que mientras
en tu altar
Sueñas
espejos mágicos
no habrá mañanas.

Soy tu esencia
tu alimento
tu pútrido vientre
o tu límpido fin
hecho sonajas,
tu génesis,
tu alfa y omega
tu averno o ciénagas.

Soy...
eso soy
y mucho más
un árbol (sombra)
hecho cenizas
de perdidas semillas
que arrastran cadenas
desde ayer
hoy
y
siempre.
¡Eso soy?, si tu lo quieres, sólo sombras y muerte!

Inédito de: Kantos de Ishpingo.


YO NO ME CORRO DE CÚSPIDES EN HIELO

Me moriré en París con aguacero
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París - y no me corro -
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.


César Vallejo



Yo no me corro...
de cúspides en hielo
noches en tormentas
fuego a ciempiés
panes podridos en alacenas olvidadas
esputo salado
y mis falanges en cascadas escarchadas.

No, yo no me corro de la noche hambrunal
niños en llanto madrigueras
de los ojos rojos de la ira por la pútrida vida
que llaga mis alforjas sonajas.

Yo, no me corro de
tus labios secos de la mar en sentencias vivas
de no saber si es inerte muerte en cadenas
porque mi candente infierno es ojo del venado herido
entre punas desiertas y estepas repletas de tu hambre.

No, yo no me corro de todo lo que en ciernes
será mi cruz...
corona de sombras huidizas
de mis huesos hoy polvo herido
echando murmullos a versos escasos.

No, yo no me corro...
ni espero guadañas perladas
rondando mi anatomía estrecha
que agazapada transcurre
y que el pan no lo señale, con el dedo acusador
no, no me corro
y te espero
rueda del ocaso
tirada por carrozas esqueléticas
de tu olvido en abismos.

Sí, te espero
porque tú hambre, te irás para siempre.

Huanuco, 21 de noviembre de 2006

De: Gloria Dávila, poemario inédito Sonajas en cadalsos


Gloria Margarita Dávila Espinoza, 1961, Huánuco– Perú, Tingo María, Huánuco, Perú.
Maestra, traductora, poetisa, teatrista, declamadora, promotora cultural y escritora. Fundadora de Arte Filosofía y Literatura "Colibrí", Cofundadora de la Revista Casza de Poesía, Cofundadora de Colibrí Amaro Ediciones, Cofundadora y ex Presidenta del Directorio de Runa Asociación Pro Cultura, Fundadora y Presidenta de la Fundación de Premios "Runa Simi", Directora del Taller de Declamación "Colibrí", Directivo de la Revista Internacional "Olandina" cuyo Director es José Guillermo Vargas Rodríguez, Corresponsal del "Oro de los Tigres" de Manuel Lozano Bs.As. Argentina, Corresponsal de la Revista Peruana de Literatura (Tingo María-Perú), Corresponsal del Movimiento Literario aBrace de Montevideo Uruguay, Representante de la Casa del Poeta Latinoamericano para Perú, Miembro de la Casa del Poeta de Perú, Consulesa de Poetas del Mundo, Huánuco, Perú, Embajadora de la Asociación Latinoamericana de Poetas para Alemania, Corresponsal del Quincenario "El Pregonero", Huánuco, Perú y Embajadora Universal de la Paz/ Ginebra Suiza para Huánuco-Perú.

Sunday, July 15, 2007

Gloria Dávila
1961, Huánuco, Perú


REDOBLE PARA EL DERECHO UNIVERSAL ABSOLUTO

¿Qué derecho tiene el pobre si viene un gran pez
y come a mansalva en el nombre de su hambre?...
...No hay derecho hermano, señores no hay derecho,
sólo el hecho de que abramos los ojos de una vez por todas y jamás
deberemos ser sardinas.
No hay derecho para esta mi piel cobriza
si no hay un cobre,
no tengo una sombra.
Ni siquiera a ser polvo hay derecho,
porque una tumba no es tuya,
¿entonces para que morir acaso?. Inténtadolo, no puedo.

Ni siquiera a leer un texto hay derecho,
allí van y están los Misti Runas,
el pan es primero.

¡¡¡Derechu...!!!
¿maypara ayhuargayqi gam?
gam niqashqanqi...
qampataq noga rurashqaga say derechu
maychomi qayqan say...
Ma,qaypa shamuy Taita, trolita...
Nogatapis wanushqaga qanan.

¿Runa simitaq mana yachasiq?
¿Imanir?
¡¡¡Imanir...!!!
Gelley mana qaptin, taita
¿imataq rurayqushaq?
Wawatapis mana yachansu,
nogatapis,llapantapis,
yawartapis mana qansu qanan taita
lichitapis munayqaga, tantapis...
valortapis wanushnani qanan.

Tú dirás..., !Sacarás pecho!...
Y de qué sirve, sino de dar trabajo al aliento
por gritar a todo pulmón
Libertad bermellón,
Pan azul,
Justicia colorada;
verdad del color de la selva.

Hoy, sólo tienes derecho
a ser un mendigo de pan, rodando por las calles,
una justicia como el cáncer duro
y a acaso no, a leer un cartel ...!No hay vacantes!
A ese contexto pertenecemos,
sufrida población,
los desnutridos,
los muertos de hambre
los sin oportunidades
los tercer y cuarto mundistas
los parias y segregados

Ay apu con muru punchu,
mayparami aywuargayqi qam?
qaypa shamuy taita...

¡¡Ama RUNA ama, ama suwanqisu..
Ama llullanqisu,ama
qaypaga noga shamushqaga qanaq
runa shimitaq yachachinayqipaq
tantata miqunayqipay.


Transfiguración de piel

Danzo
al compás:
de mambas
del hielo
del fuego
de la hiel
alzando corazas
hechas de sulfuro
a miradas frías
al ver mi piel
roce
a la eternidad
para ser...
sol
luna
tierra
aire
fuego
agua
en tanto
espuelas doradas
escudan mi sopor.

Tingo María, 24 de junio 2007


Prohibido llorar vientos hollín


Arte de: Alfredo Alcalde
Me duele...
...el dolor,
¡Ay, cómo me duele...!
cantos testados
en réquiem,
epitafios
a memorias perdidas
a pieles impuestas al fogón;
escalinatas al viento hollín.
Me duele...
...el llanto
¡Ay, cómo me duele...!
son silbidos de cuervos al acecho,
pasos en zanjadas al abismo
en brazos de un angel de la sombra.
Duele el dolor...
...¡Ay, cómo me duele...!
son persecusiones
a mi andar
impuestos en gillotinas filosas,
anacoretas
e insinuantes...
gólgotas preñadas de espanto.
¡¡¡Dolor cómo me dueles...!!!
...Ay. cómo duele,
no es más ésta mi piel
ni saliva mía,
son abanicos de piedades
sin mas
ni más...
mientras mis nervios
son trenes en marcha sin fin
anquilosados a su cáliz sin fe,
porque el pútrido pan
es olvido a mis fauces;
suspiro en tañido de campanas,
caminantes...
al compás sombras:
cenizas,
pardas,
ocres,
amorfas,
arrieros de mi suspiro
magma al carbón
hiel de su propia hiel.
Tingo María, 29 de junio 2007


Surcando el averno


Fluyo en el espacio ignoto
cercenando mi efigie
que a grescas
se ha batido
para ser hélice
de huracanes
convexos.
Diluyo en tanto mi sonrisa
al tiritar de cuerpos
asomados al fuego
hecho estalactitas
y estalagmitas
en simbiosis
con el oculto
amanecer
de escenas
que en sintesis
son sólo magma
del eterno.
Susurro mi voz
al eco defragmentado
de una noche ardorosa
por ser escalinata
del jubileo
cincelando mi estratósfera
cubo de una silueta
oscura
ágrafa
amorfe
simulando
tañidos
de campanas
silentes
al eco único
mientras
mi ocaso es
piedra
inoculada
e irisada
de amapolas negras.


Fuego del cadalso a ojos vacuos de amburana cearensis


Soy...
moud,
muud,
hammaca...
hamaaaaaaaaaaaaaaca?
?amburana cearensis
hija y madre,
padre y abuelo
de
loros machacos
pumas,
águilas,
jaguares
y caimanes
deslizándose dócilmente
en anatomías de cuerpos
tupidos de pigmento en arco iris
de aire puro
en simbiosis.
Soy
fuego
y sombra
si tú lo quieres
hamaca,
cruz,
cadalso
o portal de luz
bebida de
calma
de guerra
y látigo de
fuego
hielo
tibio
y candente.
Soy...
esencia
de tu vida
de tu muerte,
de tus ojos
que hoy son
gruesas
gotas de ríos
en raudas caídas
de plata
o diamantes ocultos
en tupidas selvas vírgenes,
y tú vienes
mezquino
y resumes
mi cuerpo
a páginas antiguas
de alcobas
de alelí
orquídeas
o
nauseabundos olores
repleto de alcoholes
en tanto
oigo el canto
de mis tristes aves
que a mi puerto arriban
dibujando sonrisas
hecho sólo ecos
que a tu razón
le son
nada o poco;
indiferentes.
Soy la Madre Diosa del Mundo,
soy...
esfinge elemental
ritual de imágenes
Iaooooo,
Iaaaaaoooooo?
alma primordial,
soy del viento la cumbre
y de la mar sus profundas aguas.
Hoy...
te miro desde aquí,
desde mi elaborada sabia
en sumun de raíces
fundidas en tierras profundas
entre ronsocos,
jabalíes,
shapajas
setas rojas
añujes,
manatíes
que en danza triunfal
pipean
el humo del toé
pero,
eso soy si lo quieres
y
acaso no?
tus manos
tus garras
pezuñas
tu cuerpo
y mente
tu magma
y etérica esencia
pero,
no olvides?
que mientras
en tu altar
Sueñas
espejos mágicos
no habrá mañanas.
Soy tu esencia
tu alimento
tu pútrido vientre
o tu límpido fin
hecho sonajas,
tu génesis,
tu alfa y omega
Tu averno o ciénagas.
Soy?
eso soy
y mucho más
un árbol (sombra)
hecho cenizas
de perdidas semillas
que arrastran cadenas
desde ayer
hoy
y
siempre.
¡Eso soy?, si tu lo quieres, sólo sombras y muerte!

Inédito, de De: Kantos de Ishpingo.


YO NO ME CORRO DE CÚSPIDES EN HIELO



Me moriré en París con aguacero
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París - y no me corro -
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.

César Vallejo



Yo no me corro?
de cúspides en hielo
noches en tormentas
fuego a ciempiés
panes podridos en alacenas olvidadas
esputo salado
y mis falanges en cascadas escarchadas.

No, yo no me corro de la noche hambrunal
niños en llanto madrigueras
de los ojos rojos de la ira por la pútrida vida
que llaga mis alforjas sonajas.

Yo, no me corro de
tus labios secos de la mar en sentencias vivas
de no saber si es inerte muerte en cadenas
porque mi candente infierno es ojo del venado herido
entre punas desiertas y estepas repletas de tu hambre.

No, yo no me corro de todo lo que en ciernes
será mi cruz?
corona de sombras huidizas
de mis huesos hoy polvo herido
echando murmullos a versos escasos.

No, yo no me corro?
ni espero guadañas perladas
rondando mi anatomía estrecha
que agazapada transcurre
y que el pan no lo señale, con el dedo acusador
no, no me corro
y te espero
rueda del ocaso
tirada por carrozas esqueléticas
de tu olvido en abismos.

Sí, te espero
porque tú hambre, te irás para siempre.

Huanuco, 21 de noviembre de 2006
De: Gloria Dávila, poemario inédito Sonajas en cadalsos


Gloria Margarita Dávila Espinoza, 1961, Huánuco– Perú ,Tingo María, Huánuco, Perú.
Maestra, traductoria, poetisa, teatrista, declamadora, promotora cultural yescritora.Fundadora de Arte Filosofía y Literatura "Colibrí", Co-Fundadora de la Revista Casza de Poesía, Co-Fundadora de Colibrí Amaro Ediciones, Co- Fundandora y ex Presidenta del Directorio de Runa Asociación Pro Cultura, Fundadora y Presidenta de la Fundación de Premios "Runa Simi", Directora del Taller de Declamación "Colibrí", Directivo de la Revista Internacional "Olandina" junto a José VargasRodriguez, Corresponsal del "Oro de los Tigres" de Manuel Lozano Bs.As. Argentina, Corresponsal de la Revista Peruana de Literatura (Tingo María-Perú), Corresponsal del Movimiento Literario aBrace de Montevideo Uruguay, Representante de la Casa del Poeta Latinoamericano para Perú, Miembro de la Casa del Poeta de Perú, Consulesa de Poetas del Mundo, Huánuco, Perú, Embajadora de la Asociación Latinoamericana de Poetas para Alemania, Corresponsal del Quincenario "El Pregonero", Huánuco, Perú y Embajadora Universal de la Paz/ Ginebra Suiza para Huánuco-Perú.
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